Las feministas radicales se han convertido en las opositoras más abiertas del movimiento transgénero.
Lo que está en discusión actualmente es la llamada Ley de Igualdad, que los demócratas de la Cámara están copatrocinando. Esa lista incluye a los representantes de Nevada, Steven Horsford, Susie Lee y Dina Titus. El proyecto de ley agregaría una prohibición de la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género a varios estatutos, incluida la Ley de Derechos Civiles.
“Como nación, hemos sostenido durante mucho tiempo que no podemos sentarnos y ser tolerantes con la intolerancia que está diseñada para degradar y excluir a las comunidades”, dijo el presidente de la Cámara Judicial Jerrold Nadler, demócrata por Nueva York, durante una audiencia sobre el proyecto de ley.
Pero resulta que muchas feministas están de acuerdo con la exclusión ocasional de ciertas comunidades: los hombres biológicos.
En 1972, el gobierno federal aprobó el Título IX, se requería que las escuelas que recibían fondos federales ofrecieran a las niñas acceso equitativo a las actividades, incluidos los deportes. Solo una de cada 27 niñas en una escuela pública jugó un deporte de preparatoria antes del Título IX, ahora el 40 por ciento lo hace.
Observe cómo el significado de la palabra “igualdad” ha cambiado. Bajo el Título IX, la igualdad significa que los niños y las niñas deben tener oportunidades atléticas. Los demócratas ahora afirman que la igualdad significa que un niño tiene derecho a competir contra las niñas.
Imagina cómo esto debe hacer sentir a una feminista, han pasado décadas luchando por oportunidades sólidas para las atletas y ahora, te dicen que dejes que los hombres participen, algunas mujeres liberales ya han tenido suficiente.
“No puedes simplemente proclamarte mujer y ser capaz de competir contra las mujeres”, tuiteó la jugadora de tenis Martina Navratilova en diciembre. “Debe haber algunos estándares, y tener un pene y competir como mujer no se ajustaría a ningún estándar”.
Los partidarios de H.R.5 se niegan a reconocer que los hombres biológicos tienen ventajas físicas sobre las mujeres biológicas. Sorprendente cómo algunos liberales están seguros de que el mundo terminará sin reducciones en las emisiones de carbono, pero dudan de que la testosterona adicional ofrezca ventajas atléticas a los hombres.
Ahora, los activistas transgénero van más allá, afirman que los hombres que se identifican como mujeres son mujeres y deben ser tratados como tales.
Esta idea no es genial para las mujeres biológicas. En el Reino Unido, los funcionarios trasladaron a un delincuente sexual condenado a una prisión para mujeres después de que él afirmara ser transgénero, luego agredió sexualmente a las presas.
“Su pene estaba erecto y sobresalía de la parte superior de sus pantalones”, comentó el fiscal mientras detallaba uno de los asaltos de una manera que requiere una ignorancia activa de la biología.
H.R.5 atacaría a ese tipo de incoherencia, no es de extrañarse que las feministas estén hablando.
Julia Beck, periodista del Frente de Liberación de la Mujer, declaró en oposición al proyecto de ley. Dijo que se requeriría que las sobrevivientes de violación compartan espacio con hombres biológicos en refugios para mujeres.
Ella no es una activista de derecha, el Frente de Liberación de las Mujeres es una “organización feminista radical dedicada a la liberación total de las mujeres”.
El año pasado, un hombre biológico en Canadá que afirmaba ser una mujer, demandó a una mujer musulmana que trabajaba en un salón, ¿su crimen? razones religiosas, ella se negó a quitarle el bello de sus áreas privadas. Pidió 50 mil dólares en daños “inmensos” a su dignidad.
Locura.
Este proyecto de ley, patrocinado por más de 230 demócratas, es una verdadera guerra contra las mujeres.