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Agradezcan a la policía de Las Vegas por salvar vidas afroamericanas

Actualizado January 8, 2020 - 11:41 am

Si crees que las vidas afroamericanas importan, entonces deberías estar agradecido por los esfuerzos policiales del Departamento de Policía Metropolitana (LVMPD).

Como el Review-Journal reportó el domingo, hubo 144 homicidios en el Condado de Clark el año pasado. Homicidio no es sinónimo de asesinato; incluye muertes por defensa propia y disparos policiales justificados. Es un número grande, pero es una caída sustancial de los 216 homicidios que ocurrieron en 2018, pese a una población creciente.

Los oficiales indican que la disminución no ocurrió por accidente. El alguacil Joe Lombardo cree que el haber puesto más oficiales en la calle tuvo el mayor efecto en la reducción de los homicidios. LVMPD también aumentó sus esfuerzos para resolver cada homicidio, definido como hacer un arresto o identificar a un acusado. La policía resuelve más del 80 por ciento de sus homicidios, lo cual excede el promedio nacional del 62 por ciento.

LVMPD también ha estado aprovechando la tecnología, en 2017, pilotó un programa llamado ShotSpotter: una serie de sensores de audio que permiten a la policía identificar disparos sin tener que esperar una llamada al 911. Esto permite que la policía y los paramédicos respondan más rápido, lo que hace más probable que los oficiales puedan recolectar evidencia y arrestar a un sospechoso. Detener la violencia armada es importante porque más de dos tercios de los homicidios del año pasado involucraron armas de fuego.

Estos esfuerzos han salvado desproporcionadamente las vidas de los afroamericanos. La Oficina del Censo informa que el 12.8 por ciento de los residentes del Condado de Clark son afroamericanos. Sin embargo, el treinta por ciento de las víctimas de homicidio fueron afroamericanas. Si el número de homicidios se hubiera mantenido constante, 21 afroamericanos más habrían muerto el año pasado. Eso supone el mismo desglose racial de las víctimas.

Esto no sólo está sucediendo en Las Vegas.

“No hay agencia gubernamental más dedicada a la proposición de que las vidas de los afroamericanos importan que la policía”, dice Heather MacDonald, becaria del Instituto Manhattan. “La revolución policial proactiva que empezó a mediados de los años 90 ha reducido drásticamente la tasa de asesinatos en los barrios de bajos recursos y ha salvado miles de vidas de afroamericanas”.

En lugar de aplaudir, muchos en la izquierda política pintan a la policía como villanos. El movimiento Black Lives Matter afirma que está respondiendo a “la violencia sancionada por el estado y el racismo contra los afroamericanos”. Colin Kaepernick una vez usó calcetines que representaban a los oficiales de policía como cerdos. “En los últimos años, hemos visto un terrible nivel de violencia policial contra personas desarmadas en la comunidad minoritaria”, escribió el senador Bernie Sanders en su sitio web. Antes de finalizar su candidatura presidencial, el ex alcalde de San Antonio, Julián Castro, dijo que el sistema policial de Estados Unidos “está roto en sí mismo”.

Esto no quiere decir que todos los policías sean intachables. En 2018, la ex policía de Dallas, Amber Guyger, quien es blanca, entró en el apartamento equivocado después de su turno y disparó y mató a Botham Jean, un hombre afroamericano que vivía allí. Un jurado la encontró culpable de asesinato en octubre pasado. Las preocupaciones más sistémicas, como el perfil racial, también merecen ser tratadas.

Pero esas discusiones deberían centrarse en lo que las estadísticas, como las de aquí en Las Vegas, muestran. La policía no es perfecta, pero en conjunto, están trabajando seriamente y con éxito para salvar vidas afroamericanas.

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