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¿Volverá el servicio ferroviario de pasajeros a Las Vegas tras una larga ausencia?

¿Podría volver el servicio ferroviario de pasajeros a Las Vegas tras 24 años de ausencia?

No ocurrirá de la noche a la mañana, pero dos proyectos ferroviarios que unirían el sur de Nevada con el sur de California podrían recibir un impulso financiero del proyecto de ley de empleos de 2.3 billones de dólares del presidente Joe Biden.

Si se aprueba, el proyecto de ley financiaría el plan de Amtrak para ampliar su servicio a nivel nacional y lanzar varias rutas nuevas, incluida una entre Los Ángeles y Las Vegas.

Además, el proyecto de ley podría financiar el proyecto de tren de alta velocidad de Brightline West, que uniría a los pasajeros entre Las Vegas y el sur de California en trenes de pasajeros que pueden correr hasta 200 mph.

El director general de la Comisión Regional de Transporte (RTC, por su sigla en inglés), MJ Maynard, respaldó la posibilidad de añadir un servicio ferroviario de pasajeros a Las Vegas.

“Cada día se contabilizan aproximadamente 47 mil vehículos de promedio en la Interestatal 15 en la frontera estatal”, señaló Maynard. “Una ruta de Amtrak de Los Ángeles a Las Vegas proporcionará otra opción para que los visitantes viajen a Las Vegas, ayudando a aliviar la congestión, mejorar nuestra calidad del aire y mejorar significativamente la experiencia general del visitante”.

El comisionado del Condado Clark, Michael Naft, dijo que tanto Amtrak como Brightline son proyectos atractivos, pero cree que cualquiera de ellos que esté operativo primero probablemente tendrá mejores resultados.

“Está claro que ambos tienen beneficios”, señaló Naft. “Cualquiera de las dos opciones ayudará a aliviar el tráfico de la 15, que no podemos tolerar más fines de semana de tráfico acumulado”.

La historia de Amtrak

Según el plan de Amtrak de 15 años para ampliar el servicio, Las Vegas y Los Ángeles estarían unidas por tren de pasajeros por primera vez desde que la compañía dejó de prestar servicio en esa ruta en 1997.

El enlace de Las Vegas forma parte de los 30 mil millones de dólares en posibles proyectos de Amtrak que crearían unos 550 mil puestos de trabajo en todo el país. Otra posible ruta en la región incluye la conexión de Phoenix y Tucson, Arizona, con Los Ángeles.

No se facilitaron los detalles de la posible ruta de Las Vegas a Los Ángeles, y los intentos de obtener más comentarios de Amtrak fueron infructuosos.

El portavoz del Departamento de Transporte de Nevada, Ryan McInerney, declaró que Amtrak se puso en contacto con el departamento en julio con respecto a su interés en incluir a Las Vegas en los futuros planes de servicio ferroviario de pasajeros. McInerney no tenía información adicional sobre los planes de Amtrak.

El último servicio de Amtrak que incluyó a Las Vegas se dio entre 1978 y 1997 con el nombre de Desert Wind, que unía Los Ángeles con Salt Lake City con una parada en 100 S. Main Street, detrás de Plaza en el Downtown.

El servicio diario operó hasta 1995, cuando se redujo a tres veces por semana, antes de cerrar finalmente en 1997.

El servicio Desert Wind tuvo múltiples problemas que hicieron que su rendimiento se resintiera y finalmente cesara, según un par de estudios de la RTC de junio de 2007.

El servicio se consideraba un tren de larga distancia y no estaba diseñado para quienes querían viajar entre Las Vegas y Los Ángeles, según un estudio de la RTC realizado para determinar la viabilidad de reanudar el servicio ferroviario de pasajeros entre ambas ciudades.

Entre Las Vegas y Los Ángeles, había cuatro paradas en el sur de California (Barstow, Victorville, San Bernardino y Fullerton) y un viaje de ida duraba hasta siete horas y 15 minutos, lo que, según los estudios, era ineficiente para los pasajeros.

En cambio, un viaje en coche de Las Vegas a Los Ángeles dura unas cuatro horas en condiciones normales de tráfico.

Además, cuando Desert Wind funcionaba a diario, solo ofrecía un único viaje al día, y el horario no estaba hecho para que los pasajeros salieran o llegaran en las horas óptimas del día.

La inadecuada capacidad ferroviaria a lo largo de la ruta también provocaba congestiones y hacía que el sistema ferroviario de pasajeros sufriera frecuentes retrasos, según uno de los estudios de la RTC.

No obstante, el estudio de la RTC señalaba que existía una fuerte “demanda actual y futura” para que un sistema ferroviario de pasajeros volviera a operar entre el sur de Nevada y el sur de California.

Proyecto de tren de alta velocidad

El otro proyecto que podría recibir financiación en virtud del proyecto de ley de Biden (la línea ferroviaria de alta velocidad prevista por Brightline West entre Las Vegas y Victorville, California) se viene comentando desde 2005, pero aún no se ha puesto en marcha.

La construcción de Brightline West iba a comenzar a finales del año pasado, pero se detuvo cuando la empresa pospuso una venta de bonos prevista de 2.4 mil millones de dólares que habría generado la financiación de la parte inicial de vías y estaciones del proyecto de ocho mil millones de dólares.

La empresa achacó el retraso a la inestabilidad del mercado debido a la actual pandemia de COVID-19.

En una actualización del estado del proyecto presentada el 4 de enero ante la Nevada High-Speed Rail Authority, Brightline West declaró que planeaba comenzar la construcción de la línea ferroviaria de aproximadamente 170 millas ya esta primavera.

Sarah Watterson, presidenta de Brightline West, aclaró en la carta que el proyecto “está previsto que comience la construcción a principios del segundo trimestre de 2021”.

Watterson señaló que la empresa estaba actualizando su plan de financiación para el proyecto, que incluye el relanzamiento de la venta de bonos de actividad privada que el proyecto podría volver a recibir de Nevada, California y Estados Unidos.

Brightline puede volver a solicitar este año los 200 millones de dólares en bonos de actividad privada de Nevada que utilizó para su oferta de bonos en 2020, pero esas conversaciones aún no se han llevado a cabo, según Terry Reynolds, director del Department of Business and Industry del estado.

Ben Porritt, portavoz de Brightline, agregó que los responsables de la empresa “imaginan un país en el que los pares de ciudades que están demasiado lejos para ir en coche y demasiado cortos para ir en avión estén conectados por el tren de alta velocidad”.

La empresa ya tiene un comienzo en este sentido, ya que la compañía hermana de Brightline en Florida opera una línea ferroviaria de alta velocidad entre Miami y West Palm Beach. Está ampliando su servicio en Florida, construyendo una extensión hasta Orlando que se espera que finalice en 2022, según el sitio web de Brightline.

“Brightline West es un proyecto apasionante”, comentó Porritt, “y como única empresa privada de transporte de pasajeros con operaciones interurbanas, estamos dispuestos a desempeñar un papel importante en el debate sobre el ferrocarril de alta velocidad, que debió haberse producido hace tiempo”.

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