La familia de Abraham Acosta nunca pensó que su vida terminaría en su lugar favorito: una tienda 7-Eleven.
El hombre de 32 años estaba comprando cigarrillos con su marido en un 7-Eleven en 10540 S. Maryland Parkway en Henderson alrededor de las 10:40 p.m. del jueves cuando un hombre se detuvo y le pidió fuego.
La videovigilancia de la tienda mostró a Acosta acercándose al Nissan y “aparentemente proporcionando un encendedor para un cigarrillo” cuando el conductor le disparó en la cara y se alejó.
El presunto conductor del vehículo, John Anthony Carrillo, de 29 años, fue detenido unos 15 minutos después cuando salía de un Walgreens cercano, según la policía. Carrillo está ahora acusado de llevar a cabo una ola de crímenes de tres días que incluyó robos, hurtos y asaltos y que culminó con tiroteos en Las Vegas y Henderson que dejaron a Acosta y a otro hombre muertos.
El hermano mayor de Acosta, Ray, comentó que Abraham era el pequeño de la familia, con cuatro hermanas mayores y cinco hermanos mayores. Era el alma de la fiesta y tenía una sonrisa y una risa contagiosas que podían iluminar cualquier habitación, describió.
Su hermano menor era un gran fan de las tiendas 7-Eleven, en parte por su cumpleaños, dijo Ray Acosta.
“Abraham nació el 11 de julio y 7-Eleven fue literalmente su tienda favorita desde que probó por primera vez los Slurpees cuando tenía unos dos años”, dijo. “Durante el resto de su vida amó este lugar, y es tan lamentable que su vida haya sido tomada en un 7-Eleven”.
Ray Acosta dijo que su hermano conocía los nombres de todos los cajeros que trabajaban en la tienda y que nunca dudaba en ayudar a los demás, incluso si se trataba de un extraño que pedía un encendedor.
La familia de Acosta abrió una página de GoFundMe para recaudar dinero para los gastos del funeral y el entierro y para ayudar a su marido a mudarse a San Diego, donde Abraham será enterrado. La campaña había recaudado 6,240 dólares hasta el miércoles por la mañana.
Un juez de Las Vegas denegó el miércoles la libertad bajo fianza a Carrillo, que permaneció en el Centro de Detención del Condado Clark. Los registros judiciales muestran que se enfrenta a múltiples cargos por delitos graves, incluyendo dos cargos de asesinato e intento de asesinato, tres cargos de robo e intento de robo, cuatro cargos de asalto y secuestro y tres cargos de asalto con un arma mortal.
También se enfrenta a cargos de robo e intento de hurto en el Tribunal de Justicia de Henderson, según los registros en línea.