Fiscales acordaron retirar el jueves los cargos de delito grave contra cuatro hermanas de Utah acusadas de irrumpir en una suite del Cosmopolitan Las Vegas y de atacar al marido separado de una de ellas y a su novia con puños y zapatos de tacón alto.
Tajila Mullahkhel, de 31 años, Saeida Mullahkhel, de 30, Nagras Mullahkhel, de 36, y Shakeela Mullahkhel, de 34, se voltearon a ver cuando entraron juntas a la sala de la Jueza de Paz de Las Vegas, Melisa De La Garza. El grupo se tomó fotos con sus teléfonos y grabaron un video antes de que un alguacil les pidiera que esperaran en el pasillo a que se convocara su caso.
Momentos después, regresaron con su abogado, Chris Rasmussen, y el Subfiscal de Distrito, Bryan Schwartz, le dijo inmediatamente al juez que retiraba los cargos de robo, agresión y conspiración.
“Este fue un asunto familiar privado que se debió manejar internamente”, le comentó Rasmussen a un reportero. “Estamos convencidos de que su caso fue desestimado”.
En marzo, Hosam Al-Baderi le relató a la policía que estaba en la cama durmiendo con Joslin López cuando su ex-esposa, Tajila Mullahkhel, y sus hermanas irrumpieron en su habitación, según un informe policial.
“Las cuatro mujeres comenzaron a golpearlo a puño cerrado y a arañarlo”, dice el informe. “Luego, atacaron a su novia (López) golpeándola con los puños cerrados y con sus zapatos”.
A López le arrancaron cabello y tenía marcas de arañazos en los brazos y piernas por los tacones. Al-Baderi sufrió de un ojo hinchado y rasguños, según el informe.
“No tenía idea de cómo su ex esposa encontró su ubicación o cómo subió a su habitación. Dijo que normalmente se queda en un penthouse específico, pero que en este viaje cambió la habitación para que su ex-esposa no pudiera localizarlo”.
Un trabajador de Cosmopolitan quien reconoció a Tajila Mullahkhel la había dirigido al piso 75, según el informe.
Al-Baderi le notificó a la policía que los dos habían estado separados “por algún tiempo” y que recientemente se enteró de su relación con López y “había estado extremadamente molesta”.
Ni Al-Baderi ni López se presentaron a lo que estaba programado como una audiencia preliminar, en la que un juez decide si los fiscales tenían suficientes pruebas para presentar el caso a un jurado.
El fiscal citó una ley de Nevada que le permitiría volver a presentar cargos si Al-Baderi y López dieran un paso adelante en el plazo de un año.
Más tarde, en el pasillo del séptimo piso del Centro Regional de Justicia, los cuatro hermanas posaron frente a Rasmussen para que este les tomara una foto cerca de los ascensores.
Cerca, un oficial de seguridad que esperaba testificar para otra audiencia preliminar sacudió la cabeza.