El Departamento de Transporte de Estados Unidos está proponiendo una nueva regla que prohibiría a las aerolíneas cobrar a los padres por sentarse con sus hijos pequeños.
Bajo la propuesta, publicada el jueves, las aerolíneas nacionales y extranjeras tendrían que ubicar a los niños de 13 años o menores junto a su padre o adulto acompañante de forma gratuita.
Si no hay asientos adyacentes disponibles cuando un padre reserve un vuelo, las aerolíneas deberán permitir a las familias elegir entre un reembolso completo o esperar a ver si se libera un asiento. Si los asientos no se liberan antes de que otros pasajeros comiencen a embarcar, las aerolíneas deben ofrecer a las familias la opción de reprogramar sin costo en el próximo vuelo con asientos adyacentes disponibles.
La administración Biden estima que la norma podría ahorrar a una familia de cuatro hasta 200 dólares en cargos por asiento para un viaje de ida y vuelta.
“Viajar con niños ya es lo suficientemente complicado sin tener que preocuparse por eso”,dijo el Secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg.
Buttigieg señaló que cuatro aerolíneas –Alaska, American, Frontier y JetBlue– ya garantizan que los niños de 13 años o menos puedan sentarse junto a un adulto acompañante sin costo adicional.
El Congreso autorizó al Departamento de Transporte para proponer una norma que prohíbe los cargos por asientos familiares como parte del Acta de Reautorización de la Administración Federal de Aviación, firmada en mayo por el presidente Joe Biden.
La legislación también aumenta las sanciones para las aerolíneas que violen las leyes de protección al consumidor y requiere que el Departamento de Transporte publique un “tablero” para que los consumidores puedan comparar el tamaño de los asientos en diferentes aerolíneas.
El departamento aceptará comentarios sobre la propuesta de la norma de asientos familiares durante los próximos 60 días antes de redactar una norma final.
Las aerolíneas se han opuesto a la campaña de la administración Biden para eliminar lo que llama “tarifas basura”.
En abril, la administración emitió una norma final que requiere que las aerolíneas emitan automáticamente reembolsos en efectivo para vuelos cancelados o retrasados y que divulguen mejor las tarifas por equipaje o cancelaciones.
Las aerolíneas demandaron y a principios de esta semana, un panel de tres jueces del Quinto Circuito de Apelaciones de Estados Unidos bloqueó temporalmente la norma, argumentando que “probablemente excede” la autoridad de la dependencia. Los jueces concedieron una solicitud de las aerolíneas para detener la norma mientras se resuelve la demanda.
Al preguntarle si la norma de asientos familiares podría enfrentar el mismo destino, Buttigieg señaló que el Departamento de Transporte también cuenta con el respaldo del Congreso, que autorizó la norma.
“Cualquier norma que propongamos, estamos seguros de que está bien fundamentada en nuestras autoridades,” dijo Buttigieg durante una conferencia telefónica para discutir la norma de asientos familiares.