La familia y los amigos de Ashleigh Cope, residente de Henderson, tienen la esperanza de que la joven de 22 años haya llegado a un punto de inflexión el jueves en su lucha contra una infección rara y a menudo mortal causada por lo que comúnmente se conoce como “bacteria carnívora”.
Ashleigh, quien se encuentra con soporte vital en un hospital de Las Vegas, se enfermó el martes antes del Día de Acción de Gracias después de una cirugía ambulatoria en una clínica de Henderson.
Fue hospitalizada al día siguiente, y luego, en el Día de Acción de Gracias, cayó en coma y ha estado con soporte vital desde entonces, mencionó la amiga de la familia, Heather DeLong.
La madre de Ashleigh, Andrea Cope, dijo el jueves: “Casi no nos dieron ninguna oportunidad de supervivencia para ella”.
“Todos se estaban despidiendo”, agregó DeLong.
El sábado, Ashleigh fue trasladada de un hospital que la familia declinó nombrar al Lions Burn Care Center del UMC. “Venir aquí fue la última oportunidad que tuvo para sobrevivir”, dijo DeLong, quien elogió la atención y la compasión de las enfermeras y los médicos de allí.
Ashleigh había sido diagnosticada con fascitis necrosante, que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) describen como “una infección bacteriana rara que se propaga rápidamente en el cuerpo y puede causar la muerte”.
Las autoridades sanitarias creen que un tipo de estreptococo (la bacteria responsable de la “faringitis estreptocócica” y otras enfermedades) es la causa más común de fascitis necrosante, que puede entrar en el cuerpo a través de cortaduras, quemaduras, heridas quirúrgicas e incluso picaduras de insectos.
“Es muy raro que alguien con fascitis necrosante extienda la infección a otras personas”, según los CDC. La infección es mortal para una de cada tres personas que la contraen. Cada año se documentan entre 700 y mil 200 casos en Estados Unidos.
La primera línea de defensa son los antibióticos intravenosos y la cirugía para detener la propagación de la infección. “Sin embargo, a veces, los antibióticos no pueden llegar a todas las áreas infectadas porque las bacterias han matado demasiado tejido y reducido el flujo sanguíneo”, según los CDC. “Cuando esto sucede, los médicos tienen que extirpar quirúrgicamente el tejido muerto”.
Ashleigh tuvo su sexta cirugía el jueves por la mañana. “Están pensando que se adelantaron a la infección”, comentó la amiga de la familia, Patty Frank, quien se reunió con familiares y amigos en el café de la UMC para hablar con un reportero.
La familia y los amigos de Ashleigh no revelaron la naturaleza de la cirugía ambulatoria que precedió a la infección o dónde tuvo lugar, por preocupación, señalaron, por la privacidad de Ashleigh.
Andrea Cope agregó que la noche después de la cirugía, su hija comenzó a tener dolor en el sitio quirúrgico y “no podía retener nada”.
“El resultado fue que su hija tuvo que ir a una sala de emergencias local.
Ashleigh desarrolló rápidamente sepsis, una grave infección sanguínea, y sus riñones comenzaron a fallar, desarrolló tejido infectado desde la caja torácica hasta las rodillas.
Un signo de mejora es que su presión arterial se ha estabilizado, declaró su familia.
“Tenemos que concentrarnos en la hora por hora”, apuntó el tío de Ashleigh, Doug Cope, uno de las docenas de amigos y familiares que han estado en el hospital la semana pasada para apoyar a Ashleigh.
Ashleigh gozaba de buena salud y estaba en forma antes de su hospitalización, dijo su madre. La madre y la hija habían hecho yoga y pilates “nada extenuante” el día antes de su cirugía.
El personal del hospital le ha dado crédito a su juventud y a su condición física por ayudarla a sobrevivir.
“Ella es valiente, atrevida, dulce, inteligente y hermosa”, describió DeLong. “Es una luz brillante y fuerte”.
“Es una gran luchadora”, añadió Patty.
“Ella nunca se rinde”, agregó su madre, una agente de bienes raíces que tiene otros dos hijos de 17 y 10 años de edad.
Ashleigh, quien cuenta con una licencia en cosmetología, comenzó un nuevo trabajo como recepcionista y secretaria hace un mes y no tiene seguro. Los amigos han creado una cuenta GoFundMe para ayudar a la familia con los gastos médicos. Hasta el jueves por la tarde había recaudado un poco más de nueve mil dólares.