Migración aleja a EEUU y México antes de reunión de líderes

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — La creciente inquietud y el rencor en México provocados por las medidas de inmigración del presidente estadounidense Donald Trump se ciernen sobre un encuentro entre funcionarios de ambos países.

Abundan los puntos de tensión de cara a la reunión el secretario de Estado, Rex Tillerson, y el de Seguridad Nacional, John Kelly, con el presidente mexicano Enrique Peña Nieto y altos funcionarios de defensa, finanzas y política exterior. Kelly es el encargado de implementar el plan de Trump, que podría suponer la deportación de millones de personas. La tarea de Tillerson es explicárselo al resto del mundo.

A la llegada de los dos funcionarios estadounidenses a la Ciudad de México, los dos países parecen estar en posiciones muy alejadas. La Casa Blanca dijo que sus relaciones están “fenomenales” y que los dirigentes abordarán la puesta en marcha del plan de Trump. México, por su parte, se limitó a decir que no aceptará el plan del republicano.

“Pienso que el secretario Tillerson y el secretario Kelly van a tener una excelente discusión allí”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer.

Pero mientras Spicer dijo que los funcionarios “analizarán en detalle la implementación de la orden ejecutiva”, México dejó en claro que no será así.

“Quiero expresar clara y enfáticamente que el gobierno mexicano y el pueblo mexicano no tienen razón alguna para aceptar decisiones unilaterales impuestas por un gobierno a otro”, dijo el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray. “No vamos a aceptar eso, porque no tenemos que hacerlo”.

Videgaray añadió la advertencia de que México no vacilaría en objetar la medida de Estados Unidos en la ONU u otras organizaciones globales.

Los funcionarios estadounidenses visitantes planeaban reunirse el jueves con Videgaray antes de un almuerzo de trabajo con funcionarios mexicanos y una reunión formal con Peña Nieto.

La agravación de la disputa sobre deportaciones se añade a una serie de controversias que han causado un desplome en las relaciones bilaterales desde que Trump asumió la presidencia hace un mes. La insistencia de Trump en que México pague por su muro fronterizo llevó a Peña Nieto a cancelar una planeada visita a Washington en enero. Las autoridades mexicanas están además aprensivas por la promesa de Trump de cambiar las relaciones comerciales y posiblemente aplicar fuertes aranceles fronterizos a productos mexicanos, un paso que afectaría profundamente la economía mexicana, fuertemente exportadora.

Salir de la versión móvil