Un ‘infierno arrasador’ destruye un edificio en el suroeste del valle

Fue un incendio masivo con una columna de humo que se podía ver a través del valle de Las Vegas el martes.

El incendio, en el 8030 W. Maule Ave. cerca de South Buffalo Drive y el 215 Beltway en el suroeste del valle, envolvió y destruyó un edificio en construcción, con las llamas visibles a millas de distancia.

Los equipos de bomberos comenzaron a responder después de las llamadas que comenzaron a llegar alrededor de las 4:30 p.m. del martes, dijo Kelly Blackmon del Departamento de Bomberos del Condado Clark en un comunicado.

El jefe adjunto de bomberos del Condado Clark, Brian O’Neal, dijo que el departamento respondió inicialmente al incendio con 75 bomberos y 11 camiones de bomberos.

“Era un infierno arrasador”, dijo Shannon Leyden, de 28 años, que también vive al otro lado de la autopista desde el sitio del incendio en un complejo de apartamentos en Rafael Rivera Way. “Nunca había visto llamas tan grandes”.

Julia Maranville, de 25 años, que vive en el mismo complejo al suroeste de South Buffalo Drive y West Sunset Road, dijo que cuando los bomberos empezaron a rociar sus mangueras sobre las llamas, empezaron a llover brasas ardientes y escombros que prendieron fuego en la hierba y los contenedores de basura.

“Pude ver las paredes del edificio cayendo al suelo mientras el fuego ardía”, dijo Maranville.

Aunque vive al otro lado de la 215, dijo que podía sentir el calor de las llamas.

“Hacía mucho calor”, dijo Maranville. “Hacía muchísimo calor”.

Pérdida total del edificio

O’Neal dijo que el edificio seguía inestable alrededor de las 6:30 p.m. del martes y se consideraba una pérdida total. Los investigadores de incendios estaban investigando la causa del incendio en la noche del martes.

Ninguno de los edificios circundantes estaba expuesto hasta el punto de evacuación, y los edificios circundantes estaban protegidos de daños duraderos del fuego, dijo.

“Creo que la estrategia defensiva inicial fue capaz de proteger esos edificios”, dijo O’Neal.

Pero Erin McClendon dijo que su edificio de apartamentos -al otro lado de la calle del sitio incendiado- envió un mensaje pidiéndole a los inquilinos salir.

“Vimos cómo ese edificio se quemaba por completo”, dijo McClendon mientras ella y sus dos hijos se encontraban en la acera de enfrente.

McClendon conducía hacia su casa con sus dos hijos, Laurence Andrews, de 15 años, y Landen Edwards, de nueve, cuando se percató de la columna de humo.

A medida que el fuego avanzaba, McClendon y sus hijos salieron de su apartamento y caminaron por la calle hasta la intersección de Cimarron Road y Maule Avenue para observar las llamas.

“Lo primero que sentí fue mucho miedo. Porque era como, ¡mira eso! El fuego era tan grande”, dijo Edwards, señalando el edificio en llamas.

Después de ver la respuesta de los bomberos, McClendon elogió su trabajo para apagar las llamas.

“Me siento realmente segura con ellos en nuestra comunidad. Han hecho un gran trabajo”, afirmó.