Los espacios con aire acondicionado y la hidratación extra serán esenciales en los próximos días, ya que el sur de Nevada y los estados vecinos experimentan la primera ola de calor del año.
La temperatura máxima de 106º F del miércoles en el valle fue casi 10º por encima de lo normal, y se espera que el calor de tres dígitos persista al menos hasta el fin de semana, dijo el meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional Chris Outler.
“Se esperan temperaturas peligrosas y potencialmente récord durante los próximos días”, advirtió la oficina del Servicio Meteorológico de Las Vegas en un tuit.
El Servicio Meteorológico emitió un aviso de calor excesivo desde las 10 a.m. del jueves hasta las 8 p.m. del sábado, y el Condado Clark se preparó para abrir estaciones de refrigeración a partir del jueves.
“Por favor, tomen precauciones si pasan tiempo fuera”, tuiteó el condado.
Los meteorólogos pronostican una temperatura máxima de 108º para el jueves, que subirá a 109º el viernes y el sábado. Se espera un ligero respiro el domingo, cuando se prevé que las temperaturas alcancen los 103º.
Se espera que las brisas de la tarde durante el fin de semana no superen las 20 a 25 mph, dijo Outler.
Los expertos advirtieron que las condiciones sofocantes de este principio de año pueden resultar especialmente peligrosas porque el cuerpo de las personas no se ha adaptado al calor.
En estas condiciones, la gente debe evitar salir al aire libre desde las 10 a.m. hasta las 6 p.m. si es posible, dijo Outler. También deben beber mucha agua, aunque no tengan sed.
La portavoz de NV Energy, Jennifer Schuricht, dijo que la empresa había planificado con antelación “para garantizar que estamos preparados para satisfacer las necesidades energéticas de nuestros clientes”, y añadió que la empresa de servicios públicos no tenía previsto enviar peticiones para conservar energía esta semana.
Tres dígitos en el suroeste
Se prevén temperaturas abrasadoras en el suroeste de Estados Unidos durante los próximos días, y se espera que otras ciudades como Phoenix y Palm Springs, en California, superen los 110º.
En partes de Nuevo México y Texas también se alcanzarán los tres dígitos.
El calor forma parte de la rutina normal del verano en el desierto, pero los meteorólogos dicen que eso no significa que la gente deba sentirse tranquila. El calor excesivo causa más muertes en Estados Unidos que otras catástrofes meteorológicas, como huracanes, inundaciones y tornados juntos.
“Aunque las condiciones meteorológicas van a ser agradables, hay que limitar considerablemente las actividades al aire libre”, dijo Gabriel Lojero, del Servicio Meteorológico Nacional de Phoenix.
Las temperaturas pronosticadas desde el miércoles hasta el lunes son las más altas de este año. Los científicos afirman que es probable que las olas de calor sean más frecuentes e intensas en el futuro, debido al cambio climático y a la creciente sequía.
Los efectos del aumento de las temperaturas se dejan sentir con mayor intensidad entre las poblaciones vulnerables, como las personas sin hogar y los trabajadores que trabajan al aire libre. Los desamparados tienen unas 200 veces más probabilidades de morir por causas asociadas al calor, dijo David Hondula, científico del clima que dirige la Oficina de Respuesta y Mitigación del Calor de la ciudad de Phoenix.
Al menos 130 desamparados se encontraban entre las 339 personas que murieron por causas asociadas al calor el año pasado en el Condado Maricopa, que incluye a Phoenix y tiene la mayor población de todos los condados de Arizona.
Phoenix ya se considera la gran ciudad más calurosa de Estados Unidos. Una ola de calor del verano pasado elevó las temperaturas hasta los 118 grados.
La mayoría de los habitantes del sur de Nevada, el centro y el sur de Arizona y el sureste de California corren el riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con el calor si no toman las precauciones adecuadas, dijo Lojero. Entre ellas, llevar ropa de color claro, mantenerse hidratado y buscar sombra si tienen que salir al exterior.
Se espera que las temperaturas empaten o superen los récords, incluso por la noche, cuando hace más frío, antes de bajar en general a principios de la próxima semana.
Se pronostica que Phoenix y Yuma rozarán los 115 grados el sábado, cuando el calor alcance su punto máximo en toda la región. Blythe y El Centro, en California, alcanzarán o superarán esa temperatura.
En Phantom Ranch, en el fondo del Gran Cañón, también se registrarán temperaturas de tres dígitos, lo que recuerda que el tiempo cambia drásticamente desde el borde del cañón hasta sus profundidades.
En algunos lugares de Nuevo México también se esperan temperaturas que podrían batir récords durante el fin de semana. Las tormentas eléctricas de los próximos dos días podrían provocar inundaciones repentinas en zonas que han sido abrasadas por los incendios forestales, según los pronósticos.
Aunque las temperaturas se habían enfriado esta semana en Texas, el calor se está acumulando durante el fin de semana.
Los números calientes se adelantan a la temporada anual de lluvias del Suroeste, conocida simplemente como monzón, que comienza a mediados de junio y se extiende hasta septiembre. Los expertos en meteorología dicen que el fenómeno tiene las mismas posibilidades de estar por encima, por debajo y de ser normal este año en Arizona.