Una de las peores cosas que uno puede experimentar después de planificar un viaje durante meses es llegar al aeropuerto y que la compañía aérea te comunique que va a cancelar tu vuelo.
No ocurre constantemente y algunas aerolíneas incluso han adoptado políticas de no sobrevender sus vuelos. Pero a veces ocurre y los consumidores deben conocer sus derechos antes de dirigirse al aeropuerto.
He aquí algunos consejos del Departamento de Transporte de Estados Unidos:
¿Qué pasa si mi compañía aérea me “expulsa”?
La denegación de abordaje, también conocida como “bumping”, suele ocurrir cuando un vuelo está sobrevendido. Las aerolíneas suelen buscar voluntarios para tomar un vuelo posterior a fin de evitar la denegación de abordaje, y a menudo negocian las condiciones de un bono en la puerta de abordaje.
Los pasajeros que renuncian voluntariamente a sus asientos suelen ser reubicados en un vuelo posterior y también reciben algún tipo de compensación, normalmente un vale para un vuelo futuro. La compañía aérea está obligada a explicar claramente las condiciones del vale a quienes lo aceptan.
¿Qué debo hacer si me expulsan involuntariamente?
Es legal que las compañías aéreas expulsen a pasajeros de sus vuelos y suelen establecer prioridades en función de la hora de facturación del pasajero, el importe pagado por el boleto y la condición de viajero frecuente. Las aerolíneas están obligadas a entregar a los pasajeros expulsados una declaración escrita en la que se describan sus derechos y cómo se determinó su selección.
“Las compañías aéreas pueden denegar el abordaje o expulsar a un pasajero de un vuelo, incluso después de aceptar su pase de vuelo e informarle de que puede abordar, si la denegación o expulsión se debe a un riesgo para la seguridad o la salud, o a un comportamiento considerado obsceno, perturbador o ilegal”, explica el Departamento.
¿Cuánto me corresponde por ser expulsado?
Existe una fórmula para indemnizar a los pasajeros expulsados de un vuelo nacional. Si el retraso es de una hora o menos, no hay indemnización adicional. Si el retraso a la llegada es de una o dos horas, la indemnización debe ser del 200 por ciento de la tarifa de ida, hasta 775 dólares. Si el retraso es superior a dos horas, es el 400 por ciento de la tarifa de ida, hasta 1,550 dólares.
También hay circunstancias en las que un pasajero puede no recibir indemnización por bumping. Eso ocurre cuando se sustituye el avión originalmente previsto para el viaje por otro de menor capacidad, cuando el personal de vuelo determina que hay problemas de seguridad de peso y equilibrio del avión, cuando un pasajero pasa de una clase de servicio superior a otra inferior (los pasajeros deben recibir la diferencia entre las dos tarifas), en vuelos chárter y en vuelos en aviones con 30 o menos asientos.