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El precio de la vivienda en el sur de Nevada sigue cayendo por la resistencia de compradores

Los precios de la vivienda en Las Vegas cayeron el mes pasado a su nivel más bajo del año, a medida que el aumento de las tasas hipotecarias arroja agua fría sobre el mercado.

El precio promedio de venta de viviendas unifamiliares de segunda mano - la mayor parte del mercado - fue de 430,990 dólares en noviembre, un dos por ciento menos que en octubre, pero un 2.6 por ciento más que en noviembre del año pasado, según un nuevo reporte de la asociación comercial de Las Vegas Realtors (LVR).

Los precios de las viviendas del sur de Nevada han bajado mucho durante meses en medio de una desaceleración más amplia en el mercado. Según datos de la asociación, el precio promedio de venta de noviembre fue el más bajo de 2022, y las ganancias de precios año tras año se redujeron.

“Los precios de las viviendas locales están empezando a parecerse más a lo que hicieron hace un año”, dijo el presidente de Las Vegas Realtors, Brandon Roberts, en un comunicado de prensa. “Pero ciertamente estamos en un lugar diferente al que estábamos el año pasado, cuando los precios se dispararon y establecieron récords. Por supuesto, como dijimos en su momento, esas condiciones no eran sostenibles”.

Con las tasas hipotecarias más del doble de lo que eran hace un año, los compradores de vivienda siguen resistiéndose en el sur de Nevada.

En noviembre se vendieron 1,521 viviendas, un 53.5 por ciento menos que en el mismo mes del año anterior, reportó la asociación.

Los posibles vendedores también parecen estar rehuyendo, ya que la asociación reportó 2,096 nuevos listados de viviendas unifamiliares el mes pasado, un 26.5 por ciento menos de un año a otro.

Mientras tanto, el inventario disponible disminuyó el mes pasado, pero siguió siendo muy superior al de hace un año. Un total de 7,342 casas estaban en el mercado sin ofertas a finales de noviembre, un 7.1 por ciento menos que en octubre, pero un 161.7 por ciento más que en noviembre del año pasado.

Roberts dijo en el comunicado que desde que las tasas hipotecarias empezaron a aumentar este año, se ha “desencadenado una situación en la que muchos compradores tienen dificultades para permitirse una vivienda, mientras que muchos propietarios son reacios a vender y renunciar a la tasa de interés históricamente baja de la que disfrutan en su vivienda actual”.

El año pasado, las bajas tasas hipotecarias alimentaron un frenesí de compra de vivienda en el sur de Nevada. Los precios de venta alcanzaron nuevos máximos históricos prácticamente todos los meses, las casas se vendieron rápidamente, los cazadores de casas abarrotaron las propiedades con ofertas, y los constructores regularmente aumentaron los precios y poner a los compradores en listas de espera.

A nivel local y nacional, sin embargo, los compradores han estado en gran medida frenando durante meses. La Reserva Federal ha subido las tasas de interés varias veces este año en un intento de combatir la inflación, y el aumento de los costos de los préstamos ha provocado menos ventas de viviendas en todo el país.

El índice promedio de los préstamos hipotecarios a 30 años fue del 6.49 por ciento la semana pasada, frente al 3.11 por ciento del año anterior, según reportó el comprador de hipotecas Freddie Mac.

Selma Hepp, economista jefe adjunta de la empresa de seguimiento de la vivienda CoreLogic, dijo en un comunicado la semana pasada que los mercados de la vivienda “siguen enfrentándose a una pérdida de confianza de los consumidores” y a un “continuo estancamiento entre compradores y vendedores”.

Los compradores potenciales se ven “frenados por el rápido aumento del costo de la propiedad de la vivienda y el temor a que bajen los precios”, dijo Hepp, quien añadió que los vendedores potenciales tienen incentivos financieros para no moverse, ya que podrían tener ya una tasa hipotecaria más baja que el que obtendrían en una nueva compra.

En medio de la caída de la compra de viviendas en el sur de Nevada, los vendedores han reducido cada vez más sus precios, y los constructores han ofrecido más incentivos a los cazadores de casas y mayores comisiones a los agentes que traen a los compradores.

En total, la mediana del precio de venta de una vivienda unifamiliar de propiedad ha caído poco más de 51 mil dólares frente al récord de 482 mil dólares en mayo, según datos de Las Vegas Realtors.

Ese mes, los precios de venta subieron un 25 por ciento con respecto al año anterior.

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