La proyectada línea del tren de alta velocidad entre Las Vegas y Los Ángeles podría convertirse en un importante medio de transporte interestatal para los eventos deportivos.
El presidente de Brightline, Mike Reininger, prevé crear un servicio que se adapte a los diversos acontecimientos deportivos profesionales que se celebren en Las Vegas, de forma similar a lo que la empresa ofrece en Florida con su línea ferroviaria. La empresa ofrece un servicio específico para los partidos de los Miami Heat de la NBA, los partidos del Inter de Miami de la MLS y los acontecimientos deportivos universitarios, con planes de ampliar el servicio a los partidos de los Orlando Magic una vez que esa extensión esté operativa este año.
“Actualmente ya hacemos solo este tipo de paquetes con equipos deportivos del sur de Florida”, declaró Reininger al Las Vegas Review-Journal este mes. “La conexión natural entre el transporte y los acontecimientos deportivos es algo muy cercano a nuestros corazones, algo con lo que hemos desarrollado una experiencia y no podemos esperar a traerlo a este mercado”.
Brightline West espera iniciar a finales de este año la construcción de la tan rumoreada línea de tren que unirá el sur de Nevada y el sur de California, con el servicio en marcha en 2027. El plan depende de que el proyecto consiga una subvención de 3,750 millones de dólares que la empresa privada y el Departamento de Transporte de Nevada solicitaron este año.
El inicio del tren en 2027 podría ser el momento perfecto, ya que los Raiders y los Golden Knights ya juegan en el valle de Las Vegas y los Oakland Athletics tienen previsto empezar a jugar en un estadio del Strip de 1,500 millones de dólares en 2028.
La Final Four masculina de la NCAA también se jugará en Allegiant Stadium en 2028, y la NBA también podría aterrizar en Las Vegas en esa fecha, si el proyecto de estadio-hotel del Oak View Group está terminado para entonces y la NBA sigue adelante con su expansión al mismo tiempo.
El estadio, preparado para la NBA, estaría ubicado junto a la estación de Brightline West Southern Nevada, cuya construcción está prevista en una porción de terreno de más de 300 acres en Las Vegas Boulevard, entre las carreteras Blue Diamond y Warm Springs.
Además, está previsto que los Juegos Olímpicos de 2028 se celebren en Los Ángeles.
“La introducción de la industria del deporte en Las Vegas ha sido en sí misma un enorme catalizador para la economía y, sin duda, la conectividad estructurada que representa Brightline ayudará”, dijo Reininger. “Las bases de fans de los dos lugares (el sur de Nevada y el sur de California) estarán conectadas en ambas direcciones. Tener la posibilidad de hacerlo de una manera realmente fácil y agradable, independientemente del equipo del que seas fan”.
El sistema ferroviario de 218 millas uniría Las Vegas con Rancho Cucamonga, California, con paradas en Apple Valley y Hesperia. En Rancho Cucamonga, los viajeros podrán hacer transbordo al área metropolitana de Los Ángeles a través del servicio ferroviario Metrolink. Según Brightline, los trenes totalmente eléctricos pueden alcanzar velocidades superiores a 186 mph y llevar a los pasajeros de Las Vegas a Rancho Cucamonga en dos horas y 10 minutos.
Los pasajeros tendrán acceso gratuito a Wi-Fi a bordo, servicio de comida y bebida y equipaje facturado. La incorporación de esta nueva opción de transporte supondrá un gran impulso para la industria turística del estado, según la senadora demócrata Jacky Rosen.
“En el momento en que suben al tren, comienzan sus vacaciones”, declaró Rosen este mes durante una rueda de prensa en apoyo de la solicitud de subvención federal de Brightline. Va a suponer un verdadero cambio para los turistas de Nevada”.