El presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carlos Navarrete, invitó al fundador de la agrupación, Cuauhtémoc Cárdenas, quien ha pedido su renuncia, a una reunión para analizar la crisis por la que atraviesa la mayor fuerza política de izquierda en México.
Cárdenas, quien fundó el PRD en 1989, pidió la renuncia de todos los miembros del Comité Ejecutivo Nacional de la agrupación en una carta abierta divulgada el domingo en la que también llamó a integrar una dirección provisional con representación de las bases regionales y de diversas corrientes del partido.
En su misiva, el tres veces candidato presidencial (1988, 1994 y 2000) advirtió que el PRD está “a punto de disolverse o de quedar como simple franquicia política-electoral” subordinada a intereses ajenos a los militantes, lo que ha causado una pérdida de credibilidad de la agrupación.
Cárdenas consideró que la actual dirección ha tomado decisiones cuestionables a raíz de lo ocurrido el 26 de septiembre en Iguala, estado sureño de Guerrero, donde seis personas murieron y 43 estudiantes desaparecieron a manos de policías y miembros del crimen organizado.
El entonces alcalde de Iguala y miembro del PRD, José Luis Abarca, enfrenta un proceso penal por delincuencia organizada, secuestro y homicidio en relación con esos hechos que han causado una ola de indignación en el país y forzado la renuncia del gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, del mismo partido.
Reconoció que el partido vive un “momento difícil” debido a “decisiones equivocadas, omisiones evidentes, tolerancia con prácticas inaceptables” de las que responsabilizó a todos los miembros del partido y que se dan “en un marco de crisis nacional”.
Sobre los hechos de Iguala, opinó que “la exigencia más enérgica del PRD debe ser hacia el Gobierno federal, para que dé respuesta a la demanda de justicia, que es el grito que se escucha en muchos lugares del país”.
Y en cuanto a la demanda de renuncia, le “recordó” a Cárdenas que el partido realizó comicios internos y que los dirigentes nacionales, estatales y municipales actuales han sido elegidos “por más de dos millones de afiliados que acudieron a las urnas en un proceso inédito organizado por el Instituto Nacional Electoral”.