Las Pandillas un problema social – (Parte II)

El Tiempo localizó al oficial de la policía Metro, Jacinto Rivera, con 24 años al servicio de la comunidad, comentó que: “No se puede negar que hay pandillas en Las Vegas, con la cercanía a Los Ángeles que es donde provienen”.

Un perfil de un pandillero, según la policía, inicia desde los 14 años de edad en promedio, incluso se han encontrado casos de niños de 10 años. Al pasar el tiempo la mayoría han sido heridos, han ido a prisión y sus amigos ya están muertos o condenados de por vida, es cuando luego de estas experiencias buscan salir de esta vida.

El grafiti para el oficial Rivera, es lo de menos importancia, en comparación a sus otras actividades, es una forma de marcar su territorio y que otros pandilleros estén enterados a quién le pertenecen esas calles. “Robo oportunista, venta de drogas, uso de armas ilegalmente, robo a propiedades y automóviles, cualquier cosa que vean que produce dinero lo hacen”.

La policía divide a los pandilleros acorde a su edad, si el pandillero comete un crimen en beneficio a su pandilla (down for the barrio), la sentencia se duplica. El juez le condena 5 años por su crimen, pero si fue por la pandilla, esté pagará 10 años. Un menor de 18 años de edad, se le trata de rehabilitar, ya que tienen mayor oportunidad de cambiar la mentalidad.

Según Rivera, a un policía no le cuesta trabajo identificar a un pandillero, ya que “A ellos le gusta admitirlo, otra manera de identificarlos es mediante los tatuajes, el área donde viven y hacen sus grafitis, los colores de su ropa, la gente que los rodea, el lenguaje corporal que hacen con las manos, indican que pertenecen a cierta pandilla”.

Luego que un pandillero es aprehendido por un oficial, se le anota en un registro especial para este tipo de delincuente. No obstante, un empleador nunca podrá acceder a esta lista, podrá saber sus crímenes al hacer una revisión de antecedentes penales. Luego permanecer un año limpios de cargos y lejos de la pandilla, se les borra de la lista, informó Rivera. La protección que se consigue dentro del grupo es otro motivo identificado para la formación de una pandilla, “esos jóvenes se juntan para defenderse de otros pandilleros y forman su propio grupo, luego siguen creciendo con los niños que viven en ese mismo barrio, así fue la historia de la pandilla “los 28”, de la calle 28th”.

“En la profesión de pandillero hay 2 caminos, el panteón o la prisión, hay casos de gente que se ha reformado y son productivos para la sociedad, nunca es demasiado tarde. Los jóvenes están consientes de todo lo negativo, pero no tienen atención de sus padres y en la pandilla encuentran amigos, que aunque negativos, se identifican en un grupo”.

Acorde con un informe presentado por la Policía Metro en el 2015, la actividad del pandillerismo contaba con 18 mil 184 miembros en 630 grupos distintos.

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