Durante los últimos años han habido muchas iniciativas como parte del esfuerzo para legalizar la igualdad de matrimonio y que parejas LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transgéneros), se puedan casar. Sin embargo, el esfuerzo no ha sido equitativo para ciertas minorías que forman parte del grupo como los latinos, y especialmente, la gente indocumentada.
El hecho es que los esfuerzos para aprobar una reforma migratoria, o la equidad de matrimonio no siempre se enfoca en minorías que tienen otras necesidades y los LGBT latinos e indocumentados forman gran parte de esta minoría y siguen en una gran desventaja social y legal.
A pesar de que hay muchos grupos y organizaciones que son defensores de los derechos de los Latinos, o por los derechos de la gente indocumentada o por los derechos de la población LGBT, es muy raro que organizaciones aboguen por los derechos de la gente que pertenezca a estos tres grupos.
“Por eso hay muy poco entendimiento de las personas que pertenecen a estos tres grupos,” dijo José García, estudiante en UNLV y quien forma parte de las tres minorías. “Muchas veces la gente no entiende que hay personas con otro tipo de necesidades”
García dijo que por ejemplo, en Las Vegas y otras ciudades con una gran población de gente latina, muchos jóvenes LGBT Latinos e indocumentados no tienen familia y no pueden acceder a albergues porque no tienen documentos legales.
Según, Lisbeth Meléndez Rivera, coordinadora nacional de A La Familia Project (Proyecto a la Familia) bajo Human Rights Campaign Foundation (Fundación Campaña de Derechos Humanos), es difícil manejar el sistema migratorio para una persona LGBT Latina e indocumentada.
Meléndez Rivera trabaja para unir a familias por medio de la inclusión y la fe. Ella admite que en la mayoría de casos, los LGBT Latinos e indocumentados están muy al margen del sistema legal lo cual puede perjudicarlos en su progreso personal.
“La unión de las familia y el proceso de inclusión de miembros familiares LGBT se rompe cuando ellos reciben órdenes de deportación y son detenidos por falta de estatus migratorio,” ella dijo. “Se limita la reconciliación con sus familias y es como si hubiesen retrocedido emocionalmente.”
Adicionalmente, uno de los problemas más graves que sufre el grupo LGBT Latinos e indocumentados se refiere a la gente transgénera indocumentada, ya que cuando les dan órdenes de deportación, son puestos en cárceles del género en el cual ellos no se identifican.
“Ellos ponen a mujeres transgénero en cárceles de hombres y a hombres transgénero en cárceles de mujeres,” dijo García. “Muchas veces, hasta los ponen en aislamiento solitario.”
Según Meléndez Rivera, cuando hombres o mujeres transgéneras son colocadas en cárceles durante el proceso de deportación, les quitan las hormonas que toman y que son necesarias para mantener un balance en su cuerpo.
“Eso es ya es un problema de salud, ya que su cuerpo y su mente están en juego,” dijo ella. “Esa es una situación muy grave porque es un riesgo de salud, no solamente fisico pero mental.”
García dijo que una de las razones por las cuales los derechos de los LGBT Latinos e indocumentados no tienen reconocimiento en tanto a la ley es que no hay suficiente diversidad entre los representantes Latinos en el Congreso Americano y también en los gobiernos locales.
“Entre los Latinos hablemos diferentes géneros, clases, y orientaciones sexuales,” dijo. “Si todos los representantes latinos en puestos públicos son hombres heterosexuales y de clase alta, dónde está la diversidad?”
Por otro lado Meléndez Rivera reconoció que abrir el diálogo sobre las necesidades específicas de los LGB Latinos y en especial de los que son indocumentados, es esencial para que este grupo sea tomado en cuenta legalmente, pero añadió que el reconocimiento y entendimiento social son más importantes aún.
“Las leyes y los cambios de leyes son super importantes porque nos dan derechos,” ella dijo. “Pero una ley no cambia la manera de pensar de la sociedad, y en eso tenemos que trabajar muy duro.”