La cárcel está volviendo loco y dejando calvo a ‘El Chapo’ Guzmán, asegura su abogado

Mientras uno de los abogados de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán asegura que la “tormenta psicológica” que el capo vive en la cárcel le está volviendo loco, fármaco dependiente e incluso calvo, las autoridades penitenciarias del país recalcan que, pese a que se respetan sus derechos humanos, el líder del cártel de Sinaloa debe recordar que no está en un spa sino en prisión.

José Refugio Rodríguez, uno de los defensores legales de Guzmán Loera, aseguró en una entrevista con la cadena Radio Fórmula que visitó a su cliente en la prisión de Ciudad Juárez (Chihuahua, fronteriza con Texas) a donde fue trasladado sorpresivamente en mayo pasado, después de meses de no verlo.

“Algo que es inminente es que Joaquín se está quedando sin pelo en la parte superior de la cabeza. La calvicie es evidente”, afirmó Rodríguez.

Según el abogado, el que alguna vez fuera el mayor capo de las drogas le dijo: “No le tengo miedo a la cárcel pero no me pueden tener aislado como estoy, me van a volver loco. Esto es una tormenta psicológica. Preferiría que la tortura fuera física o golpes porque con los golpes el dolor pasa, pero esto me está matando lentamente”.

Se quejó también de sentirse incómodo de tener siempre a tres policías a un metro de distancia vigilando y anotando sus actividades.

Guzmán Loera encargó también a su abogado la encomienda de revisar los medicamentos que le suministran, pues ya se siente “fármaco dependiente”.

“No está en un spa”

Eduardo Guerrero, el titular de Prevención y Readaptación Social del Sistema Penitenciario Federal, replicó, también en entrevista con Radio Fórmula, que el trato que recibe ‘El Chapo’ es el que marca un protocolo avalado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

“(A Guzmán) no se le está torturando. Si él se siente así, pues bueno, pero está dentro de una cárcel, no está en un spa ni de día de campo, sino dentro de una prisión federal (…). Si se le está cayendo el pelo es propio de su edad”, sostuvo Guerrero, y destacó que ‘El Chapo’ tiene la posibilidad de dormir siete horas ininterrumpidas, pues “su último pase de lista es a las 11:00 de la noche y el primero a las 6:00 de la mañana”.

Sobre el estado de salud del narcotraficante, el funcionario volvió a señalar que es “perfecta”, al grado de ya no necesitar el medicamento para el control de la presión arterial que le suministraban en la cárcel de El Altiplano.

Guzmán Loera escapó en julio de 2015 a través de un túnel que conectaba la ducha de su celda en dicha prisión en el Estado de México, con una casa en construcción. Fue recapturado el 8 de enero y enviado nuevamente allí, hasta antes de su traslado a Ciudad Juárez.

El capo, que se encuentra a la espera del desenlace sobre su proceso de extradición, ha entablado a través de su equipo legal recursos de amparo para evitar ser enviado a enfrentar la justicia de Estados Unidos.

La semana pasada, el gobierno mexicano desmintió con una fotografía un fuerte rumor sobre una tercera fuga.