Los negociadores de paz de las FARC aseguraron en La Habana que el plan de desminado en Colombia acordado entre la guerrilla y el Gobierno de Juan Manuel Santos se realizará por etapas, y la primera tendrá carácter “humanitario”.
“Se van a escoger tres o cuatro territorios, pero es un desminado humanitario en esta etapa. La gente nuestra en la profundidad de la selva no va a dejar de defenderse”, declaró a los medios “Ricardo Téllez”, alias de Rodrigo Granda, antes de iniciarse en la capital cubana una nueva jornada de negociación de paz con el Gobierno.
Precisó que, en esta fase, el plan de limpieza y descontaminación de minas y explosivos se centrará en zonas “donde se afecte inmediatamente la población civil”, como parte del proceso para avanzar en el “desescalamiento” (reducción de la intensidad) del conflicto armado en Colombia.
Téllez admitió que la localización exacta de minas es “un problema bastante crítico” porque en “un conflicto tan largo obviamente quienes han minado a veces han muerto en combate y se pierde el rastro”. Algunas de las personas que colocaron minas hace décadas murieron posteriormente.
No obstante el guerrillero dio a entender que las FARC tienen una especie de “memoria de sitios” minados y “lo que se conozca de información se puede pasar con altísima precisión”.
Pero también advirtió que hay casos en que el ejército o las organizaciones paramilitares también han puesto minas o cambiado de lugar las minas de la guerrilla.
“En algunos sitios hay bombas lanzadas desde los aviones de 500 o más libras enterradas y ahí como que nadie hace escándalo y si una mina o una bomba de esas (estalla) a cuántos mata”, agregó.
Altos mandos militares colombianos y las FARC iniciaron el sábado en La Habana las primeras conversaciones técnicas para concretar el trascendental acuerdo de desminado alcanzado por sus equipos de paz el pasado 7 de marzo y definir detalles como los sitios donde comenzarán la limpieza.
Ese plan pretende erradicar los explosivos sembrados en diferentes zonas de Colombia a lo largo de más de cincuenta años de conflicto armado, y será aplicado bajo la coordinación de Noruega (país garante del proceso de paz junto con Cuba), mediante la organización Ayuda Popular Noruega.
Se trata de compromiso para detectar y desactivar en conjunto las minas antipersonales sembradas en al menos 668 de los 1,100 municipios de Colombia.
El Batallón de Desminado Humanitario (BIDES) será el encargado de ejecutar la limpieza de tierras, mientras los miembros de la guerrilla participarán “sin uniforme, armas y previa suspensión temporal de las órdenes de captura” para brindar información requerida y facilitar las tareas.