Para cuando alguien realmente buscó a Aaron Jones, ya llevaba meses muerto.
El cuerpo del niño de 13 años fue encontrado a finales de abril de 2017 envuelto en una manta bajo una lona y un montón de rocas en un desolado terreno desértico detrás de un motel. Aaron había estado desaparecido desde enero.
Un gran jurado acusó a su padre y a su madrastra de cargos de asesinato tras el testimonio de que el niño sufrió horribles abusos por parte de los adultos que se suponía debían protegerlo.
Registros confidenciales del Condado Clark que rastrean los contactos de protección infantil con las familias, obtenidos por el Las Vegas Review-Journal, documentan vívidamente una década de vida hogareña caótica para Aaron y sus hermanos con padres aparentemente no aptos.
El cuidado de Aaron era tan preocupante que los educadores de su escuela advirtieron que su vida hogareña era “una receta para el desastre”.
Se dice que su madre, Dijonay Thomas, tiene una salud mental y capacidades cognitivas en deterioro, perdiendo repetidamente el rastro de sus hijos. Su padre, Paul Jones, se declaró culpable de abuso infantil antes de obtener la custodia de Aaron y su hermana, según los registros.
Jones y su esposa, Latoya Williams-Miley, entonces ambos de 33 años de edad, vivían con 13 niños en un Siegel Suites de una habitación en una parte sórdida de la carretera Boulder llena de moteles transitorios, casinos locales y concesionarios de automóviles.
Los registros de UNITY del condado revelan que los trabajadores de protección infantil tuvieron contacto con la familia unas 100 veces, pero no actuaron con base a las advertencias sobre su vida en el hogar, y tomaron decisiones inexplicables e inconsistentes en sus intentos de proteger al joven.
La acción final que selló el destino de Aaron Jones fue un oficial de la corte que dio la custodia del niño a un padre abusivo en junio de 2016, según muestran los registros.
“En este caso, como estado entero, le fallamos a Aaron y debimos haberle proporcionado más recursos”, comentó Jared Busker, director interino de la Alianza de Defensa de los Niños, una organización sin fines de lucro que aboga por cambios para proteger a los niños abusados. “Nuestros trabajadores sociales necesitan más tiempo con las familias para tomar una decisión mejor informada”.
Aaron es sólo uno de las docenas de niños que en los últimos ocho años murieron o resultaron gravemente heridos a manos de cuidadores abusivos pese a las investigaciones de sus familias por parte del Servicio de Protección Infantil (CPS, por su sigla en inglés), lo que plantea interrogantes sobre si los recientes intentos de reformar los organismos de servicios humanos en Nevada han funcionado. A los defensores de los niños también les preocupa que la crisis del coronavirus esté impidiendo que el Servicio de Protección Infantil detecte abusos por parte de cuidadores problemáticos, ya que los niños no asisten a las escuelas donde se podría descubrir el abuso.
El vocero del condado, Dan Kulin, dijo que los funcionarios de CPS por ley no pueden comentar un caso específico, pero dijo que el objetivo del condado es mantener a las familias unidas siempre que sea posible.
“Estamos constantemente buscando formas de mejorar y hemos hecho cambios a lo largo de los años para mejorar la forma en que trabajamos con las familias para mantener a los niños seguros”, escribió en un comunicado de correo electrónico.
Advertencia de la escuela
Dos años antes de que se encontrara el cuerpo de Aaron, Ryan Lewis, entonces director de la escuela primaria Ollie Detwiler, llamó a CPS con una advertencia.
Los educadores le dijeron a un trabajador que Aaron y su hermana no se llevaban bien con otros niños, y que su madre, Dijonay, exhibía un comportamiento extraño e inmaduro, como hablar con el personal de la escuela sobre una enfermedad de transmisión sexual que había contraído, según los registros de UNITY.
Los funcionarios de la escuela describieron la situación como “una receta para el desastre”, según registros.
En lugar de prestar atención a la advertencia de los educadores, un trabajador social encontró a los niños “vestidos apropiadamente”, “habladores” y “bien educados”, después de visitar a los niños en la escuela en marzo de 2015, según los registros.
Lewis le comentó al Review-Journal que CPS debe tomar muy en serio los reportes de los funcionarios escolares, ya que están capacitados para detectar problemas y están obligados por ley a informar sobre sospechas de abandono y abuso.
“Los casos reportados por los profesionales deben ser tomados con un sentido diferente de urgencia”, indicó Lewis, quien desde entonces se ha mudado a la Primaria Edith Garehime. También dijo que los trabajadores del condado deberían poner al día al personal de la escuela sobre lo que encontraron después de las denuncias para que los maestros puedan monitorear a los niños, pero eso rara vez sucede.
Tomó un año después de la advertencia de los funcionarios de la escuela para que Thomas perdiera la custodia de Aaron y tres de sus hermanos.
Pero en lugar de encontrar un hogar de acogida, los funcionarios colocaron a Aaron y a su hermana con Jones, su padre biológico, quien recibió una sentencia de cárcel suspendida y estaba en libertad condicional después de declararse culpable en 2015 de abusar de otros dos niños bajo su cuidado, según muestran los registros del tribunal.
Una vez que Aaron estuvo bajo la custodia de Paul Jones, el padre le daba puñetazos repetidamente, lo obligaba a permanecer de pie durante días en un rincón de un apartamento empapado en su propia orina y heces, retuvo comida y animó a sus hermanos a pegarle mientras Williams-Miley le arrojaba comida enlatada al chico, según el testimonio ante un gran jurado de 2017 que investigaba la muerte de Aaron.
El maestro de la Octava Audiencia del Distrito Judicial, David Gibson, Jr., que otorgó la custodia de Paul Jones, dijo que sus manos estaban atadas por las leyes estatales a pesar de su ambivalencia sobre la colocación de los niños con un padre abusivo.
“En retrospectiva es fácil ver esto y para cualquiera que lo vea, es un trágico caso de abuso y negligencia”, dijo Gibson, cuya posición en el tribunal familiar fue la de dictaminar sobre la custodia y la seguridad de los niños. “La ley de abuso y negligencia no es adecuada para proteger a todos los niños. Hay situaciones que están fuera del control de nadie”.
«The abuse and neglect law is not adequate to protect every single child. There are situations beyond anyone’s control.»
Casos de la CPS
El caso de Aaron es sólo una de las docenas de muertes de niños cada año en el Condado Clark que pudieron haber sido evitadas por el personal de CPS.
Entre 2012 y 2019, unos 180 de los aproximadamente mil jóvenes menores de 18 años que murieron en circunstancias sospechosas o resultaron gravemente heridos en el Condado Clark tuvieron contacto previo con el personal del Servicio de Protección Infantil, según un análisis de los registros del forense y CPS.
Según los registros, más de un tercio de los casi 70 niños de 13 años o menos que murieron en homicidios fueron investigados por CPS antes de su muerte.
Si bien los registros detallados como los que el Review-Journal obtuvo sobre Aaron Jones siguen siendo confidenciales en esos otros casos, está claro que muchos murieron después de que se les dejara con sus cuidadores.
Busker dijo que los funcionarios deberían gastar más dinero para proteger a los niños maltratados. “En general, como estado, necesitamos hacer esto mejor”, recalcó. “Un niño que muere es demasiado”.
Kulin dijo que el condado está trabajando para encontrar más familias que abusen de sus hijos.
“El alto número de casos en los que no hemos tenido contacto previo con la familia es preocupante”, indica la declaración. “Sabemos que los casos más trágicos de abuso y negligencia suelen ocurrir en hogares en los que el abuso o la negligencia se producen con cierta regularidad. Por eso es importante que el departamento se ponga en contacto con las familias en crisis lo antes posible”.
Década de abandono
La familia de Dijonay Thomas llamó la atención de CPS en 2006, cuando se denunció que había quemado a Aaron, según registros de UNITY. Los trabajadores de protección de menores no pudieron encontrar ninguna marca en el niño.
En ese momento, Aaron estaba ansioso por ir al preescolar, mostrando su nueva ropa y corte de pelo al personal de CPS, dicen las notas de UNITY. Le gustaban los animales, mostrando una tortuga como mascota para los visitantes y haciendo ruidos de animales para llamar la atención de los trabajadores de CPS.
Un año después de la denuncia de quemaduras, Dijonay dio a luz a su tercer hijo que no pudo alimentar adecuadamente, según los registros. El niño fue puesto bajo custodia de protección en junio de 2007 después de que ella sólo le diera dos onzas de fórmula al día en lugar de cuatro.
Después de retirarle al niño en 2007, los trabajadores hicieron unas dos docenas de visitas a la familia, de las cuales sólo la mitad fueron sin previo aviso. El Tribunal Familiar del Octavo Distrito Judicial corroboró la negligencia en el caso de la alimentación con fórmula, pero en diciembre de 2008 devolvió el bebé a Thomas y cerró el caso.
El maestro de la audiencia se refirió en los registros sólo a Sullivan como “le dijo a Dijonay que era una madre maravillosa y que continuara con su buen trabajo”, según muestran los registros.
Dijonay vio a un psiquiatra a petición de CPS y éste determinó que ella “posee, en determinadas circunstancias, la capacidad de criar a sus hijos de manera segura y eficaz”, según los registros.
Pasaron más de cuatro años sin que se presentaran quejas ni se anotara nada en el registro de UNITY.
En 2013, la policía de North Las Vegas llamó a CPS después de que la hermana de Aaron denunciara que había sido golpeada y que su hermano había sido amenazado con un cuchillo por el novio de Thomas. Aaron, días después de su décimo cumpleaños, le comentó a la policía que su hermana, que era dos años menor, había mentido porque no le caía bien el novio de su madre, según registros. La acusación fue encontrada sin fundamento, pero los funcionarios del condado señalaron la preocupación por el cuidado de Dijonay de su creciente familia.
“El otro parece ser de bajo funcionamiento y puede tener problemas con respecto a los comportamientos apropiados para la edad”, escribieron los trabajadores de CPS, añadiendo que la madre llevó a la hija a la primaria usando tacones altos y lápiz labial.
En ese momento, Aaron era el hijo mayor de la familia y se enorgullecía de tratar de ayudar a criar a sus hermanos, incluyendo la preparación de comidas rudimentarias y el cuidado de los más pequeños, escribieron los trabajadores en notas de UNITY.
Negligencia
Varias veces los trabajadores de CPS determinaron que las acusaciones de negligencia eran infundadas, incluso después de que la policía documentara que Dijonay perdió el rastro de sus hijos.
En 2014, uno de los niños escapó del apartamento familiar mientras Thomas estaba en la ducha. Robó un carrito de golf y lo estrelló contra un todoterreno estacionado. CPS cerró el caso, determinando que no hubo negligencia y que los niños estaban a salvo.
Al año siguiente, en noviembre de 2015, uno de los hermanos de Aaron huyó de la familia durante un viaje a un centro comercial en Charleston Boulevard y fue encontrado por la policía, que observó que el niño de ocho años orinó en el coche patrulla y la madre no parecía preocupada.
“Al ubicar a la madre, hubo preocupación por su distanciamiento de la situación y su capacidad para comunicarse, ya que el oficial sospechaba que podía estar borracha”, escribió un trabajador de CPS.
Los trabajadores también encontraron que uno de los niños no había ido a la escuela en casi un mes. Thomas es citada en los registros de UNITY diciendo que los niños no van a la escuela porque no quieren ir.
En total, cuatro acusaciones de supervisión inadecuada contra la familia no fueron corroboradas, según una anotación del 23 de enero de 2016 en los registros de UNITY.
Thomas y su abogado, que desde entonces ha sido inhabilitado según el sitio web de la Asociación de Abogados de Nevada, no pudieron ser contactados para hacer comentarios.
La familia vivía en varios apartamentos y moteles semanales alrededor de Las Vegas y North Las Vegas, siendo “desalojados varias veces debido al comportamiento de los niños”, según los registros.
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El 19 de abril de 2016, los trabajadores decidieron que los niños estaban en peligro inminente y los trasladaron a Child Haven, el centro de protección infantil del condado.
Aaron, de 13 años, aparentemente estaba pasando un mal momento en Child Haven, según los registros de UNITY. A menudo se peleaba y provocaba a otros niños, atacando físicamente o discutiendo con otros jóvenes en las instalaciones del condado al menos cuatro veces.
Seis días después de que CPS se llevara a los niños, el padre de Aaron, Paul Jones, le comentó a los trabajadores de CPS que quería a Aaron y a su hermana. Los registros, que terminan en mayo de 2016, no describen cómo Jones se enteró de que Dijonay perdió la custodia.
Jones todavía estaba bajo libertad condicional después de declararse culpable de abuso infantil, negligencia o puesta en peligro en respuesta a los cargos de haber golpeado a sus hijos de 14 y 3 años con un cable, según muestran los registros del tribunal. Pero les dijo a los trabajadores de CPS que cumplió con todos los requisitos en su caso de abuso infantil y que no debería afectar su capacidad de cuidar a Aaron y a su hermana, según muestran registros de UNITY.
Los trabajadores de CPS permitieron a Jones ver a los niños. “CPS acordó establecer visitas para el padre en el campus para el lunes y miércoles de 4:30 pm a 5:00 pm”, muestran las notas de UNITY.
Gibson, que desde entonces ha sido nombrado juez, no estuvo inicialmente de acuerdo con llevar a los niños a Paul Jones.
“Paul Jones expresó que estaba interesado en obtener la custodia de sus hijos, pero el fiscal señaló que el señor Jones tiene una condena penal por abuso y negligencia infantil”, afirman notas de UNITY. “El maestro (David) Gibson le informó a Jones que eso no sería una posibilidad”.
Gibson dijo que pese a su negativa inicial a conceder la custodia, el padre tiene derechos sobre los niños incluso con la condena por abuso infantil porque Aaron y su hermana no fueron los que fueron abusados en el caso penal de 2015.
“Tuvo muy buena representación de la oficina de defensores públicos”, indicó Gibson. “La oficina del fiscal no pudo impugnarlo por motivos legales. Las manos de la corte estaban atadas con base a la ley, aunque yo tenía reservas personales. Tengo que aplicar la ley basándome en los hechos que tengo en frente”.
Hogar abusivo
El 8 de junio de 2016, Paul Jones obtuvo la custodia de Aaron y su hermana. En noviembre, los padres y 13 niños se mudaron a las Suites Siegel, según el informe de arresto del asesinato de Aaron.
Gibson dijo que él y los abogados de ambos lados no sabían que 15 personas vivían en un apartamento de una habitación de 900 pies cuadrados. Los registros no indican si CPS visitó el motel, y Gibson se negó a decir que el condado debió haber hecho más.
“No puedo comentar sobre quién hizo qué”, mencionó. “Puedo comentar que como juez, tomé la decisión de colocar a Aaron con Paul. Desearía tener mejor información delante de mí”.
En el testimonio del gran jurado del Condado Clark, la hermanastra de Aaron, Destany Williams, de 16 años, dijo que fue testigo de cómo Aaron fue obligado a pararse en una esquina sin ser alimentado o sin que se le permitiera usar el baño, causando que orinara y defecara sobre sí mismo.
Destany testificó cómo Paul Jones ordenó a los otros niños que golpearan a Aaron mientras Williams-Miley le tiraba comida para perros y latas de frijoles.
“Era más bien como si Paul los estuviera incitando, como oh sí, deberías pegarle porque hizo esto y aquello”, le comentó Destany al gran jurado.
El abuso comenzó a menudo cuando Jones acusó a Aaron de robar comida y continuaba durante días con Paul Jones echándole agua a Aaron para mantenerlo despierto, según el testimonio del gran jurado.
El abogado defensor de Jones, Tony Abbatangelo, dijo que su cliente, que permanece en la cárcel en espera de juicio, no es culpable de los cargos. “No tengo más comentarios que decir que seguiremos adelante de la mejor manera posible con algunos cargos muy serios”, recalcó. “Paul niega cualquier implicación en ello”. La defensa no presentó pruebas al gran jurado.
La madrastra de Aaron, Williams-Miley, fue sentenciada de 10 a 25 años después de declararse culpable de asesinato en segundo grado en junio de 2019, según registros del tribunal.
Aaron muere
En el invierno de 2016-2017, Paul empujó a Aaron contra una pared del apartamento, pero esta vez Aaron no se levantó, según las transcripciones del gran jurado. Jones y Williams-Miley llevaron a Aaron a la ducha pero no pudieron revivirlo, Destany testificó.
Más tarde esa noche, Paul Jones fue a sacar la basura. Les dijo a los niños que Aaron había huido.
La fecha exacta en que Aaron murió es desconocida.
Los informes policiales, las revelaciones del condado y el testimonio del gran jurado señalan que los miembros de la familia declararon fechas entre diciembre de 2016 y febrero de 2017 para la desaparición de Aaron.
A mediados de abril de 2017, hay una anotación en una divulgación pública de CPS que uno de los niños estaba desaparecido y posiblemente se escapó.
Los trabajadores del condado marcaron esa alegación como “sólo información”, lo que no requiere una investigación de CPS ni ninguna otra acción. Se refirió a personas desaparecidas.
En ese momento, la abuela de Aaron y sus primos comenzaron a buscar al niño.
La abuela Pia Coleman recogió a la hermana de Aaron después de la escuela y la hermana le dijo a Coleman donde vivía la familia cuando Aaron desapareció. “Fuimos allí a repartir volantes”, dijo Coleman, a quien no se pudo contactar para hacer comentarios, al gran jurado.
El 25 de abril de 2017, los primos de Coleman, que también estaban repartiendo folletos, comenzaron a buscar en un terreno desértico cercado detrás de las Suites Siegel y encontraron una pila de rocas con una manta debajo.
“Fue entonces cuando nos encontramos con el cuerpo”, le dijo al gran jurado el primo Deante Magee, que no pudo ser localizado para hacer comentarios.
Ese mismo día, la policía arrestó a Paul Jones y Williams-Miley.