Se espera que el techo translúcido del Estadio Allegiant (un rasgo distintivo del estadio de fútbol de dos mil millones de dólares y 65 mil asientos) no se instale hasta mediados de mayo, meses más tarde de lo previsto originalmente.
Representantes de los Raiders destacan que pese a la demora, el estadio sigue en camino para abrir el 31 de julio, y el primer evento tendrá lugar el 16 de agosto. Sin embargo, un monitor independiente ha expresado su preocupación por el hecho de que el estadio concluya sus obras para esa fecha.
Se espera que los funcionarios del equipo ofrezcan detalles de la instalación del techo, que inicialmente estaba programada para ser completada en otoño, cuando la Autoridad de Estadios de Las Vegas se reúna el jueves.
El monitor independiente que trabaja para el consejo de la Autoridad ha expresado su preocupación por el levantamiento del sistema de redes de cable que soporta el techo liviano de EFTE (etileno tetrafluoroetileno), en un informe completado a principios de diciembre.
Representantes de Grand Canyon Development Partners, con sede en Las Vegas, reconocieron que la instalación del techo no es urgente en la finalización del estadio. Sin embargo, el informe de la empresa expresó su preocupación de que, debido a que el recinto no estará completamente cerrado, el tiempo de lluvia podría dañar algunos de los trabajos de acabado que se han completado antes de lo previsto.
“Debido al retraso en el cierre total del edificio, existe la posibilidad de que se produzcan daños climáticos a medida que se realicen más trabajos de acabado”, dicta el informe. “Nuestra evaluación es que la fecha del TCO (Certificado de Ocupación Temporal, por su sigla en inglés) puede estar en peligro si la lluvia causa daños en los acabados interiores. De las muchas situaciones posibles y retrasos potenciales que puede experimentar un proyecto de este tamaño y complejidad, el retraso de la red de cable es uno que atrae la atención por su singularidad”.
Detalles para el jueves
Don Webb, director de operaciones de la filial de los Raiders que está construyendo el estadio, declinó el lunes añadir cualquier detalle, alegando que lo discutiría con la junta de Autoridad el jueves.
“La construcción sigue estando en el objetivo de completarse sustancialmente el 31 de julio de 2020”, afirma el informe de Webb sobre el estado del proyecto en noviembre, publicado en línea la semana pasada.
“El calendario del proyecto, que registra más de 41 mil tareas individuales, muestra que algunas actividades están adelantadas y otras atrasadas”, dice su informe. “Esta condición es completamente normal. La finalización del sistema de redes de cable que soporta el techo de ETFE es una tarea que se ha retrasado. Afortunadamente, incluso si se retrasara más, su finalización no afecta a la terminación del proyecto en su conjunto, ya que las tareas dependientes y sucesoras no se encuentran en el camino de urgencia”.
Los contratistas que construyeron el estadio se prepararon el verano pasado para levantar la red de cables, que está diseñada para soportar los paneles translúcidos del techo, hasta la parte superior de la estructura.
Grand Canyon informó de que las labores “se suspenderán hasta que se superen los retos creados como resultado de la sobrecarga de los miembros estructurales del estadio”.
Cinco empresas de ingeniería han trabajado en la modificación del sistema de fijación de la red de cables al anillo de compresión en la parte superior del estadio.
En su informe actual, Grand Canyon informó que el equipo del proyecto ha revisado sus procedimientos para abordar estas cuestiones y que los cambios han causado un retraso de más de 60 días, prologando la finalización del techo hasta mediados de mayo.
Mientras que los retrasos prolongaron la instalación de los cables hasta el otoño y hacia el invierno, Webb mantuvo que el estadio se terminaría a tiempo porque otros proyectos que debían ser completados más tarde en el calendario se estaban terminando antes.
Entre los proyectos que se adelantaron al calendario se encuentran la instalación del prefabricado del tazón inferior para los asientos, las cuatro puertas del lanai en el extremo norte del estadio que se abren hacia el Strip, la estructura de soporte para la antorcha en honor al antiguo propietario de los Raiders, Al Davis, la estructura y el panel de yeso para las suites y el acero secundario para los soportes de los marcadores. Los trabajadores también han comenzado a construir la bandeja del campo y el campo de césped que se moverá al estadio para los juegos de los Raiders.
Finanzas en orden
Financieramente, el estadio va acorde a lo planeado.
Según informes que serán revisados por la junta de la Autoridad, la recaudación mensual del impuesto de habitaciones para los primeros cinco meses del año fiscal está un 3.3 por ciento por delante de la recaudación de los mismos cinco meses del año fiscal 2019. Desde que se iniciaron las recaudaciones del impuesto de habitación en marzo de 2017 hasta noviembre, el aumento de 0.88 puntos porcentuales en el impuesto ha recaudado 136.2 millones de dólares, un 0.1 por ciento de la cantidad proyectada.
La semana pasada, el Review-Journal reportó ventas mejores de lo esperado de licencias de asientos personales (PSL, por su sigla en inglés) para los boletos de los Raiders. Después de pronosticar ingresos de 250 millones de dólares en ventas de PSL anteriormente, el equipo elevó el presupuesto a 478 millones de dólares a medida que se acerca la finalización de las ventas, todo lo cual se destinará a servicios y características adicionales en el estadio.
Se espera que los Raiders también proporcionen una actualización sobre el estacionamiento y la movilidad el jueves.