84°F
weather icon Windy

El privilegio de ser madre

Dicen que una madre es comprensión porque sus palabras sosiegan, porque sus abrazos y besos sanan, y esto, sin importar qué tipo de mamá sea.

La maternidad es el único oficio en el que primero te otorgan el título y luego cursas la carrera. Y para serlo no importa si se es madre soltera, madre adoptiva, madre ama de casa, madre profesional, o madre homoparental. Por motivo de la celebración del “Día de las Madres”, El Tiempo presenta la historia de cinco diferentes tipos de madres y ellas cuentan el significado de serlo.

*Madre soltera

Adriana Sánchez nunca pensó que se convertiría en madre soltera. Ya que cuando se casó pensó que sería para toda la vida. Y mucho menos se imaginó que fuera exactamente cuándo naciera su única hija “Adrianita” que su matrimonio definitivamente terminaría. Con una beba recién nacida y un reciente divorcio, Sánchez decidió salir adelante por ella y por su hija. Comenzó a trabajar para poder sustentar a su progenitora y aunque, con altas y bajas, nunca se dio por vencida. Actualmente su hija ya cuenta con 15 años de edad. Esta madre originaria de Guadalajara, México expresó que “no ha sido fácil ser una madre soltera, pero el resultado de ver a mi hija convertirse en una jovencita buena y de buen corazón, es la mayor satisfacción del mundo”.

*Madre adoptiva

Pilar Young siempre quiso ser mamá desde que se casó. Desafortunadamente lo intentó por 10 años con un resultado negativo. Hasta que al final su esposo y ella tomaron la decisión de adoptar. El proceso fue largo ya que los Young buscaban adoptar a un recién nacido. No les importaba el sexo del bebé solo querían uno sano, para darle todo el amor que tenían reservado para él o ella, declaró para El Tiempo la madre de ascendencia peruana.

El 23 de junio del 2007 fue el día más feliz de su vida explico Pilar, su hija Allison nació y gracias a Dios tuvo la oportunidad de estar en el parto y cortar su cordón umbilical.

Para las mujeres que han soñado ser mamás toda la vida y que por alguna razón u otra no pudieron salir embarazadas Pilar les aconseja que consideren la adopción, y les recuerda que es importante entender que “madre no es la que da a luz en el parto, sino la que cría y da todo el amor incondicional”, comentó Young.

*Madre ama de casa

Fátima Mata de 32 años es madre de dos niños. El pequeño Diego de cinco años y el tierno Julián de tres. Cuando la joven madre se mudó hace cinco años a Las Vegas junto con su esposo y su primer bebé desde Sinaloa, México, ella sabía que en este país su prioridad no sería el trabajar sino ser una mamá de tiempo completo. En el viaje dejó su carrera de enfermera para convertirse en mamá y ama de casa. Esta decisión fue tomada por la pareja y cuando llegó a sus vidas su segundo hijo, esta fue reforzada para que Mata se enfocara solamente en el cuidado de sus dos chiquitos.

La ex-enfermera comentó que muchas personas piensan que el ser madre-ama de casa que no salen a trabajar es algo muy fácil. Pero para las que lo son saben que es uno de los trabajos más estresantes y difíciles porque en un empleo común existe horario de salida, pero en este no lo hay.

Su razón principal para no trabajar dijo Fátima es porque ella no confía en dejar a sus hijos en el cuidado de personas que no conoce. Y a pesar del trabajo duro que es ser madre ama de casa ella indicó que su mayor recompensa es ver crecer a sus bebés y no perderse momentos en la vida de ellos que quizás se hubiera perdido si trabajara.

*Madre profesional

Adriana Rincón-White es maestra de audiencias en el octavo Tribunal de Distrito Judicial. Es conocida enla comunidad como una de las juezas latinas más queridas y que comenzó su carrera desde abajo.

Pero para sus dos hijos, Briana y Bryce la jueza Adriana no es solamente eso, para ellos tiene un rol más importante. El que simplemente sea “su mami”.

“¡Ser madre es el mayor logro de mi vida! Más que cualquier otro título que poseo, mi favorito es ser madre”, expresó la jueza, destacando que “me convertí en madre por primera vez a la edad de 37 años y mi hija nació cuando yo tenía 40. Toda mi vida adulta estaba enfocada en mi educación y carrera y siempre supe que quería ser abogada, pero nunca pensé que también me convertiría en mamá. ¡Entonces, sucedió el amor! Ser madre requiere amor desinteresado por otro ser; ponerlos a ellos y sus necesidades por encima de las tuyas y ser un modelo a seguir”, enfatizó.

Adriana agregó lo siguiente: “Es muy difícil ser madre con una carrera tan exigente como la mía. Mis días comienzan muy temprano, antes del amanecer y son muy largos, terminando mucho después de la hora de dormir de ellos. Tan exhausta como puedo estar todos los días, me revitalizo cuando estoy con mis hijos. Mi momento favorito del día es recogerlos de la escuela y mis momentos favoritos siempre los incluyen. No soy la mejor madre del planeta, pero siempre me esfuerzo por ser la mejor madre para mis hijos. Aunque a veces es estresante ser una madre trabajadora”.

Para finalizar, la jueza de ascendencia mexicana dijo, “mi objetivo en la vida es que mis hijos siempre sepan cuánto los amaba y que miren hacia atrás a su infancia y digan ‘mamá siempre estuvo ahí para nosotros y nos dio una buena vida’”.

Para este día de las madres la también abogada extendió una felicitación por el “Día de la Madre” a todas las mamás, las que han dado a luz y las que han criado a sus hijos como si fueran suyos.

*Madre homoparental

Claudia Valenzuela es una madre como muchas otras. La única diferencia es que ella decidió convertirse en mamá y formar una familia con una pareja de su mismo género. Esto no la detuvo para seguir su sueño de convertirse en madre, por el contrario, Valenzuela explicó lo bello que ha sido la maternidad para ella y cómo su vida cambió al convertirse en la mamá de Sebastián.

“Siempre quise ser madre. Desde que era joven soñaba que tendría un bebé y que tendríamos mil aventuras juntos. Fue casi a los 40 que fui mamá Y fue la mejor decisión de mi vida”, expresó Claudia.

Originaria de Chile, Valenzuela acotó: “El ser mamá significa la responsabilidad más grande que puede tener en esta vida. Porque el amor de madre quiere lo mejor para mi hijo, quiere su tranquilidad, su felicidad, lo quiere sano”.

También enfatizó que “desde que nacen los hijos tenemos que estar ahí siempre que nos necesiten, amamantándolos, cuidándolos, y guiándolos para que sean personas de bien y con un corazón grande, sencillo respetuoso, y educado. A los niños hay que ayudarlos a descubrir el mundo y eso no es fácil. Ser madre es maravilloso, pero hay que tomárselo con mucha responsabilidad porque no es para todos”.

Al final de cuentas y a pesar de la diferencia entre cada tipo de madre, todas ellas entienden que tienen en común el saber que sus hijos no necesitan madres perfectas sino alguien que los quiera, los apoye y los entiendan. Alguien exactamente como cada una de ellas.

LO ÚLTIMO