Mandato de vacunación de empleados del CCSD está en el limbo mientras se reabren escuelas
Con el retorno de los estudiantes a las clases presenciales el miércoles en medio de un dramático aumento del COVID-19, el jefe del sindicato de profesores quiere saber qué ha sido del mandato de vacunación de los empleados aprobado por el Consejo Escolar del Condado Clark hace más de tres meses.
John Vellardita, director ejecutivo de la Asociación de Educación del Condado Clark, dijo el martes que cree que el estatus del mandato es la cuestión clave que pende sobre la reapertura de las escuelas tras las vacaciones de invierno, ya que la variante ómicron de COVID-19, más contagiosa, desencadena tasas de casos marcadamente más altas en la comunidad.
“Realmente pone en duda si el distrito escolar va a completar lo que empezó hace tres meses”, dijo sobre el mandato aprobado por el Consejo Escolar el 2 de septiembre.
El sindicato envió los puntos de discusión iniciales al distrito, pero aún no ha recibido respuesta, dijo Vellardita, añadiendo que sigue dispuesto a sentarse a negociar.
Vellardita también dijo que la junta debería estudiar si la vacuna contra COVID-19 debería ser obligatoria para los estudiantes.
Los fideicomisarios no han abordado el tema, pero un puñado de distritos escolares y un estado –California– han actuado para requerir que los estudiantes sean vacunados, con raras excepciones.
El Distrito Escolar del Condado Clark no respondió el martes a una solicitud de comentarios del Review-Journal sobre el estado del mandato de los empleados o la cuestión de exigir la vacunación de los estudiantes.
El sindicato que representa a los directores y otros administradores del distrito declaró el martes que no había recibido ninguna actualización sobre el mandato.
No fue posible contactar con otros sindicatos de empleados para que hicieran comentarios sobre las negociaciones con el distrito.
Los fideicomisarios no han recibido ninguna actualización
La presidenta de la Junta Escolar, Linda Cavazos, dijo el martes por la noche que el superintendente y el personal no han dado a los administradores ninguna otra actualización sobre el estado de aplicación del mandato.
La Junta Escolar decidió en una votación dividida exigir la vacunación de los empleados, dejando claro que esperaba que el distrito negociara los términos con los sindicatos de empleados y que el mandato permitiera exenciones médicas y religiosas.
Antes de la votación, el consejo escuchó a cientos de personas durante más de cinco horas de comentarios públicos, en su gran mayoría opuestos al mandato.
Desde entonces, el distrito escolar no ha anunciado un plazo para que los empleados deban presentar pruebas de vacunación ni ningún otro detalle.
El quinto distrito escolar más grande del país, que cuenta con 40 mil empleados, reanuda las clases presenciales esta semana.
El martes fue un día de capacitación de personal, mientras que los estudiantes vuelven a las aulas el miércoles.
En un mensaje a los padres la semana pasada, el distrito dijo que está trabajando con funcionarios de salud locales y estatales para “monitorear los desarrollos en curso de COVID-19” y es “consciente del reciente aumento de las tasas de positividad en nuestra comunidad”.
“Las estrategias de mitigación” están en su lugar para proteger la salud de los estudiantes y empleados a través de “protocolos de limpieza”, dijo el distrito, y un mandato de uso de cubrebocas estatal sigue en vigor.
En un correo electrónico enviado el martes por la noche a los padres, que los representantes del distrito escolar compartieron con el Review-Journal, el distrito señaló información más específica sobre las medidas de mitigación de COVID-19, incluyendo información sobre el distanciamiento social, los síntomas de la enfermedad que los padres deben observar y orientación adicional sobre las cuarentenas y el aislamiento basado en las nuevas recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
El distrito dijo que está exigiendo un distanciamiento social de al menos seis pies entre “personal y personal” y “estudiantes y personal” con uso de cubrebocas. Y es “altamente recomendable” entre los estudiantes, cuando sea posible.
“Cuando no es posible mantener una distancia de al menos tres pies, como las cafeterías y las salas polivalentes, es especialmente importante poner en capas múltiples medidas de mitigación, incluyendo el uso de cubrebocas”, dijo el distrito. “Durante las épocas de alta transmisión, se debe alentar a los estudiantes a usar cubrebocas tan pronto como terminen de comer y/o beber”.
Las decisiones de cuarentena serán caso por caso
Dependiendo de otras variables, las decisiones de cuarentena se tomarán caso por caso considerando factores como “el uso consistente de cubrebocas, el estado de vacunación de los individuos, los resultados de laboratorio positivos previos a los últimos 90 días de un individuo, etc.”, dijo el distrito.
El mensaje a los padres decía que, por lo general, los estudiantes que se encuentren a tres pies o menos de alguien que dé positivo –independientemente del uso de cubrebocas– serán puestos en cuarentena de acuerdo con los plazos recomendados.
Un estudiante que esté entre tres y seis pies de distancia, y los empleados que estén a menos de seis pies de distancia de alguien que dé positivo “podrían o no ser puestos en cuarentena”, según el mensaje.
El distrito también dijo que “supervisará de forma proactiva las ausencias del personal escolar” y desplegará empleados de los servicios centrales para ayudar en las escuelas identificadas, si es necesario.
La capacitación del personal el martes cubrió temas como “asegurar el distanciamiento social para todas las actividades” y realizar un mapa de los asientos de los estudiantes para todas las clases para permitir un rastreo de contactos de COVID-19 más fácil, dijo el distrito.
También cubrió las salas de enfermedad, los suministros disponibles de primeros auxilios y equipo de protección personal, asegurando “cantidades amplias” de suministros de limpieza, y asegurando que una unidad de arco UV-C R-Zero se use para la desinfección en los campus diariamente y cuando sea necesario, de acuerdo con el mensaje.
Vellardita dijo el martes que las estrategias son una cosa, pero el regreso seguro a los edificios escolares es “todo sobre la ejecución de las estrategias de mitigación”.
Un despliegue perfecto no será factible debido a desafíos como la escasez de personal, la capacidad de pruebas y las limitaciones de espacio en las aulas, añadió.
A mediados de diciembre, el distrito tenía unas 850 vacantes de empleados con licencia –frente a las 700 del primer día de clase– y cientos de vacantes de personal de apoyo.
