En México, cada año se diagnostican cinco mil nuevos casos de cáncer infantil y juvenil, 60 por ciento se atienden en hospitales del sector salud y Casa de la Amistad apoyó a 30 por ciento, el año pasado.
En el informe Anual 2017 de Casa de la Amistad para Niños con Cáncer, el presidente y el director general de la institución, Alberto Torres y Baltazar Madrid, respectivamente, precisaron que de acuerdo con el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia (Censia), en 2017 los diagnósticos más frecuentes fueron por leucemia aguda linfoblástica, linfomas y tumores cerebrales que afectaron a niños de 5 a 14 años.
En el marco del Día Internacional del Cáncer Infantil, conmemorado cada 15 de febrero, abundaron que de acuerdo con el Censia 40 por ciento de los casos no se detecta a tiempo, por lo que la institución busca incrementar el conocimiento sobre esta enfermedad.
Casa de la Amistad que cuenta con 27 años de operación, participó en actividades de difusión de signos y síntomas de cáncer con la concientización de mil 491 personas que asistieron a Rutas de Detección Oportuna organizadas por la Secretaría de Salud local.
Ello, aunado a un balance positivo de la campaña El Abrazo que Salva Vidas y la capacitación a 510 médicos, enfermeras y trabajadoras sociales para la detección oportuna de este padecimiento.
El año pasado, consiguió la colaboración con 34 hospitales en 22 estados del país, cinco más que en 2016 y del total de casos atendidos en el Sector Salud, 30 por ciento recibió algún tipo de apoyo de Casa de la Amistad, lo que se traduce en la atención de 976 niños y jóvenes.
Añadieron que el índice de sobrevida de los beneficiarios de esa institución, de 2012 a 2017 fue de 52.86 por ciento, en ese sentido, expuso que en países desarrollados este indicador alcanza tasas mayores a 90 por ciento derivados por la calidad en la atención médica y mayor precisión en el diagnóstico.
Entre otras acciones de capacitación a personal médico y organización de coloquios referentes al tema, la institución contribuyó en aumentar la capacidad de realizar diagnósticos confiables en dos hospitales de Hidalgo y Oaxaca mediante la instalación de dos citómetros de flujo.
Además, para colaborar en el apego al tratamiento de los pacientes diagnosticados con cáncer, el año pasado ofreció apoyos integrales al albergar a tres mil 352 personas y brindó más de 96 mil alimentos, así como la aportación de recursos para tres mil 878 viajes redondos, lo que se suma a apoyos educativos y psicológicos.
En su oportunidad, el tesorero del patronato, Juan Alfredo Álvarez, indicó que los ingresos generados en 2017 ascendieron a 133 millones de pesos, lo que significó un incremento de 34 por ciento.
Estos ingresos, puntualizó, fueron destinados a la cobertura de los gastos de tratamientos para niños y jóvenes diagnosticados con cáncer, así como para los gastos del albergue de Casa de la Amistad y otras actividades, lo cual ascendió a 121 millones de pesos.
Abundó que el superávit resultante, de 11 millones de pesos, es significativamente mayor al déficit que había sido presupuestado de dos millones 500 mil pesos, con estos resultados se dio cumplimiento al presupuesto 2017 aprobado por la Junta de Asistencia Privada de la Ciudad de México.
Resaltó que el balance al cierre de 2017 muestra una sólida estructura financiera al contar con activos por 144 millones de pesos financiados con el patrimonio de la institución en 96 por ciento, que asciende a 138 millones de pesos, con lo que se tienen pasivos a corto plazo por seis millones de pesos, que significan 4.0 por ciento de los activos totales.
A su vez, destacó el Fondo de Garantía por reservas restringidas por 105 millones de pesos, que respaldan el costo futuro estimado de tratamientos para los beneficiarios de la institución, fondo que se invierte con un máximo de seguridad y cuyo cálculo se revisa de manera trimestral.