CARSON CITY — Bares, tabernas y otros establecimientos de bebidas en los Condados Clark, Nye, Washoe y Elko permanecerán cerrados al menos una semana más con la esperanza de frenar la propagación de COVID-19, pero volverán a abrir en otros tres condados donde las tendencias de infección han mejorado, anunció el lunes el gobernador Steve Sisolak.
El anuncio se produce poco más de dos semanas después de que Sisolak ordenara el cierre de los bares en los siete condados para ayudar a detener la propagación del virus. Sisolak dijo durante una rueda de prensa el lunes en Carson City que tres de esos condados (Lyon, Lander y Humboldt) pueden abrir esos establecimientos inmediatamente después de mostrar suficiente mejora en criterios específicos. Esos bares, como otros negocios, podrán reabrir al 50 por ciento de su capacidad.
“Recientemente, hemos empezado a ver algunos signos positivos en nuestros datos, incluyendo un potencial aplanamiento lento y gradual tanto en los casos como en las hospitalizaciones”, dijo Sisolak. “Creemos que este progreso es el resultado de las anteriores medidas de mitigación que hemos puesto en marcha, como el recubrimiento facial obligatorio”.
Pero Sisolak añadió que es demasiado pronto para decir si esos movimientos positivos son parte de una tendencia mayor o “sólo un pequeño bache”.
El gobernador también indicó que el estado se alejará de su plan de reapertura por etapas que se centraba en reabrir industrias específicas en varias etapas. Sisolak comentó que en retrospectiva, ese plan pudo no haber sido “la forma más justa de hacerlo”, señalando que obligó a los negocios a cerrar incluso si eran estrictos en el seguimiento de sus directivas.
En su lugar, el estado pasará a un enfoque “selectivo” que se centrará en la aplicación de la ley a empresas específicas que estén experimentando brotes o que no sigan medidas de mitigación como el mandato del uso de cubrebocas del estado, así como en zonas específicas, como ciudades o incluso ciertos códigos postales que están experimentando picos.
“Creo que la mayoría de nuestras empresas y comunidades han hecho grandes esfuerzos para estar lo más seguros posible, y centrarse en las zonas problemáticas ayudará a proteger a los buenos actores”, mencionó Sisolak.
El nuevo enfoque del estado verá un aumento en la aplicación de la ley contra las empresas que no están siguiendo los mandatos de mitigación, tales como atender a los clientes que no llevan cubrebocas o seguir las normas de distanciamiento social.
“Nos acercamos a los cinco meses, no más excusas. Si la gente no está siguiendo las normas para mantenernos seguros, tiene que haber consecuencias”, recalcó Sisolak.
También incluirá actualizaciones más regulares sobre la tendencia de los datos de COVID-19, desarrollando criterios de datos más profundos que sigan más de cerca las tendencias generales y que no se desvíen tanto por las fluctuaciones diarias o semanales, lo cual, según Sisolak, ha demostrado ser un problema con las normas de criterios actuales, especialmente en los condados rurales.
El objetivo, agregó Sisolak, es dar al público y a las empresas un aviso y comprensión adicionales sobre la tendencia de sus condados en relación con el coronavirus, con la esperanza de crear más previsibilidad para la respuesta del estado.
El equipo de respuesta al COVID-19 del estado trabajará durante la próxima semana para finalizar una “estrategia de mitigación a largo plazo” para Nevada, que será presentada en detalle el próximo lunes, indicó Sisolak.
Un grupo asesor recién formado, dirigido por el director de respuesta al COVID-19 del estado, Caleb Cage, revisará los datos, criterios y progresos cada semana y trabajará con los funcionarios del condado en la mejora de la aplicación y la focalización.