CIUDAD DE MEXICO (AP) — Diez personas fueron asesinadas, seis de ellas decapitadas, en el sureño estado mexicano de Guerrero en tres sucesos diferentes pero todos aparentemente relacionados con el crimen organizado, informaron las autoridades.
El portavoz de seguridad del estado, Roberto Álvarez Heredia, indicó que seis hombres fueron decapitados y sus cabezas colocadas en una bolsa negra sobre una camioneta en la capital, Chilpancingo. Los cuerpos estaban en el interior del vehículo.
Además, cuatro cadáveres se encontraron en dos lugares distintos del municipio de Chilapa, una localidad a poco más de 60 kilómetros de Chilpancingo, que es uno de los focos de más violencia del estado. El hallazgo de cuerpos tirados en la carretera, envueltos en cobijas o decapitados en este municipio, ha sido habitual en los últimos años.
Dos de los muertos de Chilapa estaban sobre la carretera Tixtla-Chilapa, en el crucero que lleva a la comunidad de Amate Amarillo. Se trataba de dos hombres, asesinados por arma de fuego y con muestras de tortura, explicó Álvarez Heredia.
Los otros dos cadáveres, también con señales de tortura, estaban en el interior de una vivienda de la comunidad Ahuihuiyuco, en la misma zona.
Guerrero, una región pobre y productora de goma de opio, es uno de los estados con más homicidios de todo el país y donde distintos grupos del crimen organizado mantienen una lucha encarnizada por el control del territorio.