Cada año nuevo marca el inicio de una nueva etapa y es una buena oportunidad para hacer cambios para mejorar su vida. Por ejemplo, si usted es fumador y desea dejar de fumar este 2015, existe ayuda disponible para lograrlo satisfactoriamente. Este podría ser el propósito de año nuevo más importante de su vida y la de sus seres queridos.
Dejar de fumar puede ser un desafío que requiera múltiples intentos. Pero usted puede hacerlo y es importante seguir intentándolo. ¡No se dé por vencido! Cada vez que intente dejar de fumar, aprenderá algo nuevo. Casi 50 millones de fumadores han logrado dejar el cigarrillo. De hecho, desde el 2002, el número de ex fumadores en los Estados Unidos sobrepasó al número de fumadores actuales.
La promotora de salud del Distrito de Salud del Sur de Nevada (SNHD), Gail Muñiz expresó que para muchas personas que dejaron de fumar no fue lo más difícil que hicieron en su vida. Sin embargo, la buena noticia es que millones de personas lo han logrado, y usted también puede hacerlo.
“Cuando la persona es joven es muy común que digan, “Yo puedo dejar de fumar cuando yo quiera”. Lo que los jóvenes no saben es que antes de que se den cuenta ya se les hace cada vez más difícil dejar de fumar. Mientras una persona fuma o usa tabaco poco a poco va a fumar o usar más, porque su cuerpo se habitúa a la nicotina”, explicó.
“Esto sucede porque los cigarros o productos de tabaco contienen nicotina que es una droga. Cuando su cuerpo no recibe nicotina, puede sentirse molesto y tener deseos de fumar. Esto se llama síntomas de abstinencia. La buena noticia es que hay ayuda gratis y en su idioma”.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), el uso del tabaco es responsable aproximadamente de cuatrocientas mil muertes anualmente en los Estados Unidos, lo que resulta en más de 5.6 millones de años de pérdida de vida potencial. En Nevada el uso del tabaco tiene un costo en el cuidado de la salud de aproximadamente $565 millones de dólares, añade informe.
El humo del cigarrillo contiene más de 7,000 sustancias y compuestos químicos, muchos de los cuales son tóxicos o cancerígenos (causan cáncer). Fumar es una de las causas de la peligrosa acumulación de placa dentro de las arterias. La obstrucción total de las arterias puede ocasionar la muerte repentina.
“Un importante primer paso del proceso de dejar de fumar es saber por qué siente la necesidad de fumar. Cuando comprenda por qué fuma, podrá prepararse para encontrar la mejor forma de dejar de fumar. Es un proceso donde es importante comprenderse a sí mismo y saber que dejar de fumar es una de las mejoras cosas que usted puede hacer ya sea por su salud o sus seres queridos”, reveló la promotora.
El hábito de fumar hace que tenga dependencia física, psicológica y social. Tan pronto usted deja de fumar usted se va sintiendo mejor y menos van a ser los riesgos de complicaciones de salud. Por otro lado está el hábito psicológico y social que se crea en el fumador, debe ser eliminado, poco a poco, con las distintas ayudas que se pueden encontrar gratis y en español con expertos que le pueden ayudar ya sea por teléfono o en línea para más información comuníquese al 1-855-DÉJELO-YA (1-855-335-3569) para comenzar el proceso hoy. También puede visitar www.smokefree.gov para obtener información y apoyo gratuitos.
“Su llamada le puede cambiar la vida, mejorara su salud y las personas que viven a su alrededor vivirán libre de humo de segundo mano que es igual de malo que estar fumando el propio cigarro. Sabemos que es difícil dejar de fumar por eso debe buscar ayuda con expertos y el apoyo de sus seres queridos”, añadió Muñiz.
Afortunadamente, las personas que dejan de fumar pueden reducir significativamente su riesgo de enfermedad o muerte prematura. Y entre más joven sea al dejar de fumar, mayor probabilidad tendrá de evitar estos problemas. ¡Así que no espere!
Dejar de fumar:
-Disminuye el riesgo de contraer cáncer de pulmón y otros tipos de cáncer;
-Reduce el riesgo de cardiopatías coronarias, accidentes cerebrovasculares y vasculopatía periférica;
-Reduce los síntomas respiratorios, como tos, sibilancias y dificultad para respirar;
-Reduce el riesgo de padecer enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), una de las causas principales de muerte en los Estados Unidos;
-Reduce el riesgo de infertilidad en las mujeres durante su etapa reproductiva. Las mujeres que dejan de fumar durante el embarazo también reducen el riesgo de que su bebé nazca con bajo peso.
Humo de segunda mano
Si usted deja de fumar, también ayudará a proteger a sus hijos, familiares y amigos de la exposición al humo secundario del cigarrillo, el cual puede causar daños inmediatos a las personas que no fuman.
-Daños a las personas expuestas al humo del tabaco
Cuando las personas que no fuman respiran el humo secundario del tabaco, las plaquetas de su sangre se vuelven pegajosas y se pueden formar coágulos, tal como ocurre en las personas que fuman. Esta exposición aumenta su riesgo de ataques cardiacos y de muerte. El humo secundario del cigarrillo también puede causar cáncer de pulmón.
-Daño a los niños. Los bebés y niños expuestos al humo secundario del cigarrillo pueden sufrir bronquitis, neumonía e infecciones de oído.
No hay una cantidad “inofensiva “de humo secundario del cigarrillo. Puede ser peligroso aunque solo se inhale en pequeña cantidad. Si usted deja de fumar, mejorará su salud y protegerá a los que les rodean del humo secundario.
Obtenga apoyo y motivación. Los estudios han demostrado que la probabilidad de dejar de fumar es mayor si la persona cuenta con ayuda. Usted puede obtener apoyo de muchas maneras. Por ejemplo, dígale a sus familiares, amigos y compañeros de trabajo que va a dejar de fumar y que quiere que lo apoyen. Pídales que no fumen cerca de usted y que no dejen sus cigarrillos a la vista.
Intente distraerse cuando le vengan ganas de fumar. Hable con alguien, salga a caminar o póngase a hacer algo. Cuando realice su primer intento por dejar de fumar, cambie su rutina. Cambie su ruta para ir al trabajo. Desayune en un sitio distinto. Haga algo para reducir el estrés. Tome un baño caliente, haga ejercicio o lea un libro. Planee alguna actividad que disfrute para cada día. Beba mucha agua y otras bebidas.
Consulte a su médico sobre los medicamentos que pueden ayudarlo a dejar de fumar y a disminuir sus ansias de fumar.
“Para las personas que llamen a ¡Déjalo Ya!, podrán obtener gratis 8 semanas de parches de remplazo de nicotina para ayudarle a dejar de fumar”, agregó.
Testimonio de un fumador
Eleazar Acosta tiene 34 años y lleva casi dos décadas fumando. Ha tratado varias veces en dejar el vicio pero no ha podido, reveló a El Tiempo.
“Empecé a fumar muy chavito más o menos como a los doce o trece años y todo por pura curiosidad porque veía fumar tan a gusto a mi abuelito y a mi papá… ya sabes quería probar su sabor”, señaló.
Acosta empezó a fumar a escondidas entre uno a tres cigarros por semana. Al ingresar a la preparatoria había mayor oportunidad de fumar, pero ahora acompañado de algunos de sus amigos; fue desde entonces que empezó a fumar inclusive 10 cigarros diarios hasta que se dieron cuenta en su casa.
“Mi mamá sospechaba que fumaba porque llegaba apestoso a humo pero siempre decía que eran mis amigos. Un día en la prepa me dio un ataque de asma me llevaron a urgencias y tuve que decirle al doctor que fumaba; mis padres me prohibieron fumar pero no hice caso”, reveló.
Pasó el tiempo y cuando cumplió 24 prometió abandonar el cigarrillo a petición de su novia; pero desafortunadamente falló en el intento.
“Los primeros tres o 4 días muy bien, pero después sentía una desesperación, me enojaba fácilmente porque mi cuerpo necesitaba la nicotina. Me fume un cigarro de esos “baratitos” sin filtro para calmar la ansiedad y fue mi gran error termine fumando unos 5 en ese mismo día y seguí fumando”, señaló Acosta.
Años después se casó. Al enterarse que iba a ser padre y consciente de las enfermedades que trae el consumir cigarrillos de nueva cuenta decidió dejar de fumar.
“En esta ocasión deje de fumar alrededor de seis meses con ayuda de unos parches; pero después tuve un problema familiar y caí de nuevo en el vicio. En realidad es muy difícil dejar de fumar, si no cuentas con la ayuda de personas especializadas en el tema y con la ayuda de tus familiares. Pero he pensado seriamente de nuevo intentarlo pero con ayuda; quiero vivir más tiempo para mis dos hijos de 4 y 2 años. Mi padre murió de enfisema pulmonar”, precisó Acosta.