Gabriel Johnson no sabía a quién recurrir cuando entró por la puerta de Living Grace Homes.
Ella y su hijo de dos años estaban sin hogar y debido a que ella estaba envejeciendo fuera de la edad de cuidado de crianza, estaba en riesgo de perderlo.
“Tuve a mi bebé a los 13 años, y estaba acostumbrada a correr”, comentó. “Fue una cosa tras otra, pero ahora, es estable”.
Dijo que la organización sin fines de lucro de Henderson, un refugio seguro para las mujeres y madres jóvenes embarazadas y sin hogar, la ayudó a recuperar a su hijo, a conseguir un trabajo y a ponerse en camino para comenzar a estudiar pronto.
Ahora, el hogar que ella y otras tres mujeres comparten, ha sido completamente renovado gracias a una donación de 87 mil 400 dólares, recaudada por HomeAid Southern Nevada. El viernes, celebraron la renovación.
La organización ayudó a coordinar a más de 20 constructoras de viviendas, que proporcionaron donaciones de mano de obra en especie y otros socios donaron electrodomésticos a la casa de menos de tres mil pies cuadrados, cinco habitaciones y tres baños. HomeAid Southern Nevada donó los 25 mil dólares restantes necesarios para completar el proyecto de ocho semanas.
“Hemos sido muy bendecidos”, afirmó Kathleen Miller, directora ejecutiva de Living Grace Homes. “Esta casa ha estado operando los 12 años que tenemos; es un sueño verla de esta manera”.
Antes de las renovaciones, la cocina estaba atestada, a veces, hasta con nueve personas. Solo funcionaba un quemador de estufa, si usabas pinzas para encenderlo y los baños necesitaban ser renovados.
Pardee Homes reemplazó la alfombra con baldosas, amplió la cocina e instaló gabinetes nuevos, agregó ventanas nuevas y una ducha de spa completamente renovada en el baño principal.
El baño de la planta baja ahora coincide con las nuevas encimeras de granito de la cocina, y la cocina ahora tiene dos hornos y dos lavaplatos.
“Estar embarazada es lo suficientemente difícil, pero ahora pueden tener un lugar donde sentirse como en casa”, agregó. Carlos Zuluaga, vicepresidente de operaciones de construcción de Pardee Homes.
Cuando las mujeres están en el programa, siguen estrictas reglas de toque de queda, encuentran trabajo, reciben asesoramiento y cualquier otro tipo de apoyo que puedan necesitar. Pagan el 30 por ciento de sus ingresos en concepto de alquiler, que reciben de vuelta cuando se retiran del programa y pueden utilizarlos para asegurar sus propios apartamentos.
Nat Hodgson, directora ejecutiva de HomeAid Southern Nevada, destacó que la idea nació en febrero después de que la alcaldesa de Henderson, Debra March, se acercara a ella para mejorar el refugio.
“¿Qué hacen los constructores? Construimos. No se trata de dar dinero”, argumentó Hodgson. “Queremos ver el resultado directo de nuestro trabajo, y así es como lo hacemos”.
Para Johnson, quien planea mudarse a su propio apartamento en Henderson a fines de junio, el programa la ayudó a ella y a su hijo a encontrar la motivación que necesitaban.
“Mi objetivo es darle una vida mejor que la mía”, aseguró. “Aquí, es como una hermandad. Está orientado a la familia”.