Vicente Fernández Jr. regresa a los escenarios como él se autodefine: una “oveja negra”, porque ha ido en contra de lo establecido, pero dice que es único y distinto.
El cantante asegura que sigue los pasos de su padre Vicente Fernández, “El Charro de Huentitán”, quien también fue la “oveja negra” de su familia por dedicarse al medio artístico.
El mayor de “Los Potrillos” comenta cómo ha sido este regreso al estudio de grabación para trabajar en un nuevo álbum, así como a los “shows”, pues a lo largo del tiempo ha estado intermitente en la música, sin dar continuidad a sus lanzamientos.
“La industria va cambiando, pero la fruta cuando es momento de disfrutarla y poderla comer es cuando está madura y yo tuve que madurar como artista y persona para poder transmitir lo que hago en el escenario”.
Ante su trabajo constante para poder volver a debutar como cantante, Vicente Jr. explica por qué no asistió a la gala de los Grammy Latinos de este año, donde se presentaron Vicente, Alejandro y Alex Jr.
“Efectivamente, estábamos terminando este álbum y el día de hoy es cuando inicia el proyecto de la Oveja negra, no podíamos cortar lo que es el cocimiento de un producto”.
Sin embargo, dice estar orgulloso de sus sobrinos, hijos de Alejandro, quienes empiezan una carrera en el medio artístico y tienen un gran potencial con su propio estilo. Añade que con su hermano menor se lleva muy bien y considera a “Alejandrito Jr.” como uno de sus hijos.
El nuevo álbum de Vicente Fernández Jr. se llama La oveja negra, título con el que se identifica el intérprete por ir en contra de la corriente, así como de su familia, aunque aclara que su padre lo apoyó en todo para dar este nuevo arranque en su carrera musical.
“Chentillo” le rinde homenaje en este disco a tres personas importantes en su vida: su padre, su hermano y su mentor, Joan Sebastian, quien estaba contemplado para estar a cargo de la producción; no obstante, el deceso del cantautor postergó el estreno de la placa musical.