Al menos por tercera vez en los últimos ocho años, KLAS-TV, Channel 8, se ha quedado sin señal para algunos espectadores locales debido a una disputa contractual.
La filial local de la CBS fue retirada de DirecTV y DirecTV Stream a las 4 p.m. del domingo después de que la empresa no llegara a un nuevo acuerdo con Nexstar, dueño del Channel 8. En el centro de la disputa están las tarifas de retransmisión, el dinero que las emisoras locales cobran a los proveedores de cable y satélite por emitir el mismo contenido que está disponible de forma gratuita en aplicaciones o por aire a través de una antena.
“Nexstar tiene un largo historial de forzar cortes de programación en un esfuerzo por aumentar innecesariamente los precios para todos a expensas de las comunidades a las que tienen licencia y se les ha confiado servir”, dijo Rob Thun, director de contenidos de DirecTV, en un comunicado. “Seguiremos trabajando con Nexstar para llegar a un acuerdo y tomaremos todas las medidas necesarias para proporcionar a nuestros clientes acceso a su programación favorita al mismo tiempo que los protegemos de aumentos de precios injustificados”.
Nexstar, con sede en Irving, Texas, es el mayor dueño de televisiones locales del país, con 159 emisoras que dan servicio a 113 mercados.
“Nexstar ha estado negociando incansablemente y de buena fe en un intento de llegar a un contrato multianual de mutuo acuerdo con DirecTV desde mayo, ofreciendo las mismas tarifas justas de mercado que ofreció a otros socios de distribución con los que completó negociaciones exitosas en el último año”, contraatacó la compañía en su propio comunicado.
DirecTV también retiró el canal de noticias por cable NewsNation, propiedad de Nexstar.
Desde que adquirió Channel 8 en 2015, Nexstar ha estado involucrado en disputas de transporte similares.
En 2019, un desacuerdo entre Nexstar y DirecTV mantuvo el canal alejado de los suscriptores locales desde el 3 de julio hasta finales de agosto.
Y a principios de 2016, una disputa entre Nexstar y Cox Communications provocó que Channel 8 quedara fuera del sistema de cable local durante cinco días y amenazó el acceso al Super Bowl 50.