El museo de la Academia de Hollywood, una joya arquitectónica llamada a convertirse en visita obligada para cualquier aficionado al cine, mantiene su objetivo de inaugurarse en 2019 mientras se reúne la financiación estimada, cerca de 400 millones de dólares, para completar el proyecto.
“Estamos deseando inaugurar el primer gran museo de cine en la capital del séptimo arte”, dijo Kerry Brougher, director del museo, a un grupo reducido de medios, entre ellos Efe.
“El resultado de esta obra será mágico y encantador. Un lugar de ensueño. No será solo un museo, sino un campus repleto de experiencias”, agregó Brougher.
El objetivo del museo, del que este miércoles se presentaron sus primeros diseños y conceptos arquitectónicos, será transmitir la magia de las películas, desentrañar todo lo que ocurre detrás de los rodajes y explorar el impacto del cine en la cultura popular, apuntó el directivo.
Para ello, contará con la incomparable colección de artículos de la Academia de Hollywood, que incluye cerca de 12 millones de fotografías, 190.000 artículos procedentes de los rodajes de cintas clásicas del cine, 80.000 guiones, 50.000 pósters y 20.000 diseños y bocetos.
Entre esos objetos se cuentan artículos especiales pertenecientes a leyendas del cine como Cary Grant, Katharine Hepburn, Alfred Hitchcock o John Huston, entre otros.
Algunas de esas reliquias mostradas a la prensa fueron el póster original de “Los olvidados”, la primera película rodada en México por cineasta español Luis Buñuel, y la cabeza creada para el alienígena de “Alien”, diseñada por H.R. Giger.
Una de las atracciones más atractivas del museo estará dispuesta en la tercera planta, donde la Academia permitirá al visitante experimentar cómo es un día en los Óscar.
A través de la tecnología, el espectador vivirá en primera persona lo que se siente al estar en la alfombra roja, subir al escenario e, incluso, recoger la preciada estatuilla.
“La gente podrá hacer algo que la mayoría de los actores no consiguen en su vida”, dijo Brougher entre risas.
Bob Iger, presidente de The Walt Disney Company y del comité encargado de la recolección de fondos para el museo, explicó que existía “una necesidad de construir este museo extraordinario en la capital del cine”.
El Consejo Municipal de la Alcaldía de Los Ángeles aprobó en junio de 2015 la construcción del museo, una obra diseñada por el arquitecto Renzo Piano, ganador del premio Pritzker, y presupuestada originalmente en 250 millones de dólares.
La campaña de financiación del museo comenzó en 2012 y fue respaldada por figuras como Annette Bening, Tom Hanks, Brett Ratner y Bob Iger.
La intención era que el recinto se inaugurase en diciembre, pero los problemas para sufragar los fondos y los consiguientes retrasos en la obra -incluido el despido de la empresa constructora original, según la revista especializada Variety-, retrasaron un proyecto que fue complicándose por la ambición de los diseños de Piano.
Ahora, el matrimonio formado por los filántropos Haim y Cheryl Saban, ha contribuido con una donación de 50 millones de dólares, lo que deja la cifra recaudada por la Academia en 288 millones de dólares, un 75 por ciento del total necesario para la materialización del proyecto.
“No nos preocupa. Es normal que en proyectos grandes como este surjan complicaciones, pero las donaciones y créditos llegarán. No creo que vaya a ser un problema levantar un museo de cine en Los Ángeles, y menos con un diseño tan fantástico”, dijo a Efe uno de los trabajadores del equipo de Piano, que solicitó no ser identificado.
El museo, que podría albergar hasta un millón de visitantes anuales, estará compuesto por dos edificios: el antiguo May Company Building, que pasará a denominarse Saban Building, y una esfera con cúpula de cristal que recuerda a la Estrella de la Muerte de la saga “Star Wars”, en cuyo interior habrá una sala de cine de última tecnología con capacidad para 1.000 espectadores.
El museo, una vez completado, tendrá 28.000 metros cuadrados repartidos en seis plantas en las que habrá zonas de exposiciones, salas de proyección, espacios educativos y foros para eventos especiales, así como cafetería, terraza y tienda de recuerdos.
El alcalde la ciudad, Eric Garcetti, recordó que los turistas acuden a Los Ángeles “para ser inspirados y comprobar que las cosas que imaginan se hacen realidad a través del cine”.
“Es lógico que esta ciudad cuente con un espacio así dedicado a su industria y al arte. El contenido del museo emocionará a sus visitantes y a todas las generaciones venideras”, añadió.