Pese a la competencia que hubo con motivo de las Fiestas Patrias en Las Vegas, la mayoría de conciertos tuvieron el aforo necesario para que, el próximo año, los promotores sigan programando entretenimiento de lujo para el turismo y los locales.
El Mandalay Bay Event Center, albergo a miles de entusiastas personas que acudieron a celebrar el tradicional Grito de Independencia junto al apuesto cantante Alejandro Fernández. “El Potrillo”, como es conocido el hijo de Vicente “Chente” Fernández, deleitó al público con su vasto repertorio, el que cantó acompañado de excelentes músicos y un mariachi.
Los pasillos que conducían al centro de eventos estuvieron repletos de hispanos venidos de todas latitudes, pero en su mayoría allende la frontera, la consigna era celebrar a todo pulmón la gesta heroica y a los héroes que dieron patria y libertad al pueblo mexicano.
Las damas, elegantes, dejaban a su paso los olores de las marcas de perfumes de moda, los caballeros, impecables, consintieron a sus parejas llevándolas al concierto más esperado del cantante jalisciense, debido al accidente que tuvo en días pasados.
Cabe destacar que las butacas del coso tenían una camiseta, del lado izquierdo de color verde, del lado derecho rojas y al centro blancas.
En un momento dado Alejandro Fernández le pidió al público que se las pusieran y formarán –todos juntos- una gigantesca bandera mexicana, lo que sirvió de antesala al Grito que fue precedido de una queja-aclaración a un sujeto güero que anda diciendo muchas pendejadas sobre los mexicanos que vivimos en los Estados Unidos.
Al son de “Cielito Lindo”, quizá la canción tradicional más representativa del folclor vernáculo de México, rola compuesta por el moreliano Chucho Monge e interpretada –entre muchos grandes ídolos como Jorge Negrete-, Alejandro dio paso al mariachi que es otro elemento fundamental de la identidad mexicana.
“Guadalajara” fue otra canción de las aplaudidas, la noche del 15 de septiembre en Las Vegas, se convirtió en un poema que realzó el alma más provinciana e hizo que la nostalgia obligara a muchos a derramar lágrimas de añoranza.
Por eso, a coro, miles cantaron “Jalisco, Jalisco, tú tienes tu novia que es Guadalajara, muchacha bonita, la perla más rara de todo Jalisco es mi Guadalajara”.
Al final el público pidió otra, El Potrillo complació a todos con un popurrí en abierto homenaje a su padre. Luego, a la salida, la gente iba cantando y gritando consignas en contra del presidente Enrique Peña Nieto y mentadas de madres dirigidas al magnate hotelero que aspira a la candidatura republicana en la próxima contienda presidencial.