Se enfrentan miembros del consejo del CCSD por publicaciones en redes sociales
Los administradores del Distrito Escolar del Condado Clark se enfrentaron el miércoles en una reunión del consejo por unas publicaciones en redes sociales que la presidenta de la junta calificó de poco profesionales, negativas y fuera de control.
La reunión constituyó el más reciente punto álgido del consejo que dirige el quinto distrito escolar más grande del país, una junta cuya dinámica ha estado marcada por la tensión y la controversia en el último año.
El consejo estaba discutiendo -pero no tomando ninguna medida- su política que rige la forma en que los fideicomisarios deben comunicarse en redes sociales, una política que, según la presidenta del consejo, Irene Cepeda, ha sido incumplida por varios miembros del consejo.
“Cuando incumplimos nuestras políticas, erosionamos el trabajo del consejo, erosionamos la confianza del público”, dijo Cepeda sobre las recientes publicaciones en redes sociales por parte de los administradores. “Es una locura que dedique tanto tiempo a disciplinar a los fideicomisarios cuando no debería ser así”.
Pero la fideicomisaria Danielle Ford, que ha criticado al superintendente y varios aspectos del funcionamiento del distrito en redes sociales, se enfrentó inmediatamente a Cepeda por lo que llamó hipocresía y mal liderazgo.
“Todos los meses ha habido algo… algo con la intención de limitar la forma en que el consejo se comunica”, dijo Ford. “Esta debería ser la última vez que alguien intente acabar con nuestra libertad de expresión”.
De las publicaciones en redes sociales que Cepeda decidió destacar el miércoles, la mayoría procedían de la administradora Katie Williams y de Ford, además de los tuits de las administradoras Linda Cavazos y Lisa Guzmán.
Los tuits
Los tuits se organizaron por temas, temas como insultar a otros fideicomisarios o al superintendente, comentar asuntos delicados y abogar contra las posiciones del distrito o del consejo.
Incluían tuits de Williams en los que abogaba contra la educación pública gestionada por el gobierno y decía que los “comunistas” estaban intentando tomar el control de la educación.
En un tuit en el que Williams se burlaba del anuncio de dimisión de la veterana profesora del distrito Alexis Salt, Ford respondió diciéndole repetidamente a Williams que “se callara la p*** boca”.
En uno de los tuits, Ford alegó un conflicto de intereses entre la administradora Evelyn García Morales y la empresa auditora independiente del distrito, Eide Bailly. El tuit fue calificado por Cepeda en la presentación del miércoles como “difusión de información errónea o de teorías conspirativas”.
Cepeda asumió la responsabilidad de organizar los tuits para la presentación, algo que, según le dijo al Las Vegas Review-Journal, “pudo haber detallado más”.
Ford, que acudió a la reunión a distancia el miércoles junto con Williams y la administradora Lola Brooks, criticó a Cepeda por no haber facilitado los tuits a los miembros del consejo con antelación y por no haber podido ver a qué tuits se hacía referencia durante la reunión.
Ford le dijo al Review-Journal que Cepeda le había impedido discutir los materiales de referencia en una reunión diferente el año pasado cuando los miembros del consejo no vieron los materiales de antemano.
“Eres una hipócrita. Voy a tuitear sobre ello”, dijo Ford a Cepeda en la reunión del miércoles.
Cepeda dijo durante la reunión que los materiales se actualizarían en BoardDocs, la plataforma que el distrito usa para publicar sus agendas en internet. Los materiales estuvieron disponibles en BoardDocs poco después de la reunión.
Cepeda le dijo al Review-Journal que la presidenta del consejo establece el orden del día y se encarga de asegurarse de que se incluyan los materiales de referencia, pero reconoció que no siguió las mejores prácticas al asegurarse de que los materiales se incluyeran inicialmente con el orden del día en internet.
Pidiendo decoro
La junta ha soportado un año de reuniones divisivas y a menudo hostiles, en las que los administradores han tenido que lidiar con el cierre de escuelas durante la pandemia, la preocupación por un lugar de trabajo hostil y el controvertido despido y posterior recontratación del superintendente Jesús Jara.
Cepeda fue el voto decisivo que finalmente decidió el destino de Jara, votando primero para despedirlo y luego para recontratarlo.
Pero, a pesar de las polémicas relaciones de la junta directiva entre sí durante el último año, Cepeda le dijo al Review-Journal que no debería ser polémico pedir a los miembros de la junta directiva que sean profesionales en sus comunicaciones.
“Pido a la gente que tenga decoro”, dijo. “No creo que deba ser tan controvertido pedir una comunicación profesional”.
