La Junta Escolar del Condado Clark votó 5-2 el jueves para aprobar la renuncia condicional del superintendente Jesús Jara y otorgarle un pago de 250,000 dólares.
Las integrantes de la Junta Brenda Zamora y Linda Cavazos votaron en contra de la modificación del contrato.
Jara, quien ha sido el máximo líder del distrito desde 2018, anunció a fines de enero que tenía la intención de dejar el cargo. Su último día en el trabajo será el viernes.
La enmienda al contrato establece que reciba un solo pago equivalente a alrededor de seis meses de salario, menos de lo propuesto originalmente. No se le pagarán las vacaciones no disfrutadas ni los honorarios de los abogados.
Una declaración de la Junta Escolar, que se incluye con los materiales de la reunión, lo llama un “compromiso propuesto”.
Después de una petición fallida durante la reunión del jueves para nombrar al director financiero Jason Goudie como superintendente interino, los miembros de la Junta votaron 5-2 para nombrar a la superintendente adjunta Brenda Larsen-Mitchell para el puesto. Las integrantes de la Junta Irene Bustamante Adams y Cavazos se opusieron.
Larsen-Mitchell dijo a los administradores que ha prestado servicio en el distrito durante 30 años.
“Siempre he operado con un sentido de bondad e integridad, moral y ética, y una pasión por la educación”, dijo.
La reunión de horas de duración fue absorbida en su mayor parte por apasionados bloques de comentarios públicos.
Los oradores, en su mayoría educadores, se pronunciaron mayoritariamente en contra de permitir que Jara dimitiera con una indemnización, y varias personas dijeron que se le permitiría marcharse con un “paracaídas dorado”.
“Permitirle renunciar y darle un cuarto de millón de dólares no es un resultado aceptable para esta reunión”, dijo el educador Robert Cowles.
“El superintendente ya le ha costado demasiado dinero a este distrito”, dijo Stephanie Valdez, una madre de estudiantes del distrito escolar. “No se le adeuda ni merece más dinero”.
Algunos otros, como Ed González, miembro del equipo de organización escolar de Hickey Elementary School, fueron más mesurados.
Aunque González estuvo de acuerdo en que el mandato de Jara debe llegar a su fin, dijo que arrastrar el proceso más allá conduciría a una agitación financiera adicional.
“Pudiera ser mucho peor”, dijo. “Si están listos para seguir adelante, tenemos que seguir adelante”.
La Asociación de Educación del Condado Clark (CCEA) expresó su descontento en un comunicado el jueves diciendo que la administración de Jara sigue adelante con el nombramiento de Larsen-Mitchell, su “reemplazo designado”.
“Esta es la continuación de una administración de legado fracasado”, escribió el sindicato de maestros.
Varios miles de educadores de CCEA realizaron una encuesta y el 80 por ciento no confiaba en Larsen-Mitchell para dirigir el distrito como superintendente, dijo el sindicato.
“CCEA cree que la búsqueda inmediata de un nuevo liderazgo debe comenzar ahora con un nuevo superintendente en el cargo antes del próximo año escolar”, escribió el sindicato.
En busca de un sustituto permanente
Está previsto que el debate público sobre la búsqueda de un sustituto para Jara continúe en la reunión de principios de marzo.
La contratación de una empresa para reclutar a nivel nacional pudiera costar al distrito hasta 100,000 dólares y durar entre tres y seis meses, de acuerdo con una presentación de los materiales que los administradores recibieron el jueves por la tarde.
La empresa evaluaría las solicitudes; a continuación, la junta decidiría entre los tres y cinco mejores candidatos a través de una “serie de reuniones públicas”.
La búsqueda entre los candidatos de Nevada pudiera costar hasta 20,000 dólares y durar entre uno y dos meses, según la presentación.
Según el segundo modelo, la junta entrevistaría públicamente a algunos candidatos y seleccionaría al próximo superintendente.
Un mandato tumultuoso
A principios de este mes, la Junta decidió, en una votación dividida, rechazar una enmienda al contrato que pedía una indemnización por despido equivalente al salario y las prestaciones de un año. El salario anual de Jara es de 395,000 dólares. También se proponía pagar a Jara las vacaciones no disfrutadas.
Los administradores decidieron en cambio rescindir el contrato de Jara –quien se suponía que continuaría hasta junio de 2026– “por conveniencia” y encargaron al abogado de la junta que negociara condiciones alternativas.
Durante su mandato, Jara enfrentó críticas relacionadas con temas como su manejo de las negociaciones de los contratos de los maestros y de la pandemia del COVID-19, el bajo desempeño de los estudiantes, la escasez de maestros y declaraciones erróneas hechas a los legisladores estatales.
En el otoño de 2021, una junta dividida votó a favor de rescindir el contrato de Jara por conveniencia, pero luego cambió de rumbo al mes siguiente.
Ha habido una creciente presión pública para que Jara renuncie, incluidos los llamados a su renuncia, a partir del año pasado, del sindicato de maestros de la Asociación de Educación del Condado Clark y los principales legisladores estatales demócratas.
La presidenta de la Junta Escolar, Evelyn García Morales, dijo durante una reunión el 7 de febrero que se pidió a Jara que considerara un “acuerdo mutuo” para hacerse a un lado con el fin de ayudar al distrito a avanzar.
Ella también dijo que estaba preocupada por el “odio y la falta de respeto de algunas personas en la comunidad hacia Jara”.
Superintendente interina
A principios de la reunión del jueves, Cavazos hizo una petición para nombrar a Larsen-Mitchell y Goudie como co-superintendentes interinos.
Larsen-Mitchell y Goudie indicaron que cada uno estaría dispuesto a ser considerado si hay una necesidad de emergencia, de acuerdo con los materiales de la reunión.
Larsen-Mitchell ha sido empleada del distrito escolar desde 1994 en una variedad de puestos. Ha sido superintendente adjunta desde 2020.
Goudie es director financiero desde 2017.
García Morales dijo que no se sentía cómoda haciéndolo de esa manera y que la junta tendría que tomar un receso.
Es una elección entre uno u otro, dijo, porque un nombramiento de co-superintendente interino no está escrito en la agenda como una opción.
“Muy bien, bueno, pensé que valía la pena intentarlo”, dijo Cavazos.
La abogada de la Junta Nicole Malich dijo que los co-superintendentes se permitirían en el punto del orden del día, pero tendrían que preguntar a Larsen-Mitchell y Goudie si estaban dispuestos a servir en el puesto juntos.
Después de un receso de 10 minutos, la junta volvió a reunirse.
Malich dijo que Larsen-Mitchell y Goudie tenían preocupaciones acerca de ser co-superintendentes interinos debido a las altas necesidades del distrito escolar.
Ellos creían que debía haber un líder interino claro para que hubiera una comunicación y expectativas coherentes de cara al futuro, dijo Malich.
Con la petición de Cavazos declarada nula y sin efecto, la discusión continuó.
García Morales dijo que la junta se centra en los resultados de los estudiantes y aseguró que siguen viendo “tendencias positivas” en el distrito escolar, señalando a métricas como el desempeño estudiantil y el ausentismo crónico.
Larsen-Mitchell ha jugado un papel muy importante en ese trabajo, dijo García Morales, añadiendo que le encantaría verla en ese puesto.
Pero hubo diferentes opiniones entre los integrantes sobre a quién seleccionar para el puesto, con algunos diciendo que preferirían a Goudie en la posición.
Se presentó una petición para nombrar a Goudie. Pero Goudie dijo a los administradores que, si bien se sentía honrado de ser considerado como superintendente interino, creía que Larsen-Mitchell era la mejor opción.
Una petición para nombrar a Goudie fracasó en una votación de 3-4, con Evelyn García Morales, Katie Williams, Lisa Guzmán y Linda Cavazos votando en contra.
García Morales dijo que la junta se centra en los resultados de los estudiantes y en asegurar que las “tendencias positivas” en el distrito escolar continúen, señalando métricas como el desempeño estudiantil y el ausentismo crónico.
Larsen-Mitchell ha jugado un papel muy importante en ese trabajo, dijo García Morales, añadiendo que le encantaría verla en ese papel.
Comentarios de administradores superiores
Tanto Larsen-Mitchell como Goudie se dirigieron a los miembros de la Junta. Goudie les dijo: “Sé que este es un momento difícil para el distrito”.
Dijo que se sentía honrado de ser una de las dos personas seleccionadas por Jara que estarían calificadas para actuar como superintendente interino.
“Siento que he hecho mucho bien para el distrito en el mundo financiero”, dijo Goudie.
Añadió que apreciaba el apoyo de los miembros de la junta escolar, y que sabía que podría hacer el trabajo como superintendente interino y no tenía miedo de ello.
Goudie dijo que estaría dispuesto a hacer más o menos lo que fuera necesario para el distrito. Pero dijo que realmente no creía que él fuera la mejor opción y dijo que Larsen-Mitchell lo era.
También dijo que servir como superintendente interino pondría un poco más de tensión en el componente financiero del distrito.
Es un honor servir a los educadores y a los niños en el distrito, dijo Larsen-Mitchell a los administradores, señalando que trabaja duro todos los días.
Dijo que tenía un implacable sentido de urgencia en nombre de los niños, que dependen de ellos para proporcionar estabilidad en “estos tiempos difíciles”.
Larsen-Mitchell dijo que el distrito cuenta con un increíble equipo de educadores y empleados que dan el 120 por ciento cada día a los niños.
También dijo que siempre escuchará y estará orientada a las soluciones.