Brett Lashbrook, propietario de la escuadra de fútbol soccer Las Vegas Lights FC, abrió las puertas del estadio para escenificar la final de los equipos El Aserradero y Deportivo Limón, ambos militan en Las Vegas Major Soccer League, la entidad de fútbol amateur más antigua de la ciudad y, ambos equipos también son originarios de Jalisco, México.
“Este triunfo representa para nosotros muchísimo, este equipo venía buscando llegar a la final desde hace muchas temporadas, era un proyecto a largo plazo y hoy, gracias a Dios, se nos concedió el triunfo. Fue una victoria sufrida, porque el nivel de competencia en la liga es alto, tuvimos varias oportunidades de gol durante el tiempo regular, pero ellos también son excelentes jugadores”, manifestó contento el defensa de El Aserradero, Junior Toscano, quien es un jugador emblemático para la escuadra campeona.
Los dos finalistas llegaron después de haber superado a Inter Acapulco y LV Colima -respectivamente-, ambos partidos definidos en tiros desde el manchón penal.
En el terreno de juego, los primeros minutos fueron de cautela, sobre todo de El Aserradero, que ofreció una línea defensiva sólida y bien equilibrada, con Luis Parra, Kevin Posas, Martín Muñoz, Mauricio Cristales y el propio Junior Toscano; Deportivo Limón por su parte trató de abrir el marcador a base de sus individualidades, jugadores como Heriberto Durán, Romeo Flores y Guillermo Durán que desequilibraron, pero no pudieron perforar la valla defendida por Víctor Andrades (portero de El Aserradero) , quien se convirtió en la figura del partido en la ronda de tiros penales.
“Sé que podíamos ganar el partido. Dios lo quiso así, antes de los tiros penales siempre me encomiendo al Creador, tengo mucha confianza en mis compañeros, somos un equipo y así lo demostramos hoy”, comentó con cierta modestia el héroe de la jornada, quien durante el juego realizó importantes atajadas o desviadas para mantener su portería intacta.
A la gente de El Aserradero, avecindada en el valle, les agradeció el apoyo que le dispensaron durante toda la temporada, pero especialmente el domingo 10 de febrero, día que se coronaron campeones de la Liga Mayor en el Cashman Field.
El aforo en el estadio de Las Vegas Lights FC fue bueno, centenas de aficionados (de los dos finalistas) se dieron cita para atestiguar la primera gran final de equipos locales en ese inmueble. El frio y los fuertes vientos, aunados a una nube que se posó amenazante durante gran parte del juego, no impidieron la gran fiesta hispana en el Cashman Field. El comportamiento de los aficionados resultó ejemplar, no hubo bebidas alcoholicas en el estadio ni problemas de comportamiento. Reinó la paz y el espíritu futbolero, pasión que caracteriza a los hispanos en el Sur de Nevada.
Luego del tiempo regular, no hubo tiempo de alargue, se fueron a tiros penales; anotaron por El Aserradero: Mael Álvarez (10), Derian Salcido (9), Henry Andino (14), Axel Catalán (7) y Carlos Araiza (21), mientras que por Deportivo Limón anotaron: Erik Reynaga (3), Tony Murillo (6), Julio Borjas (13), Edgar Durán (8) y falló Heriberto Durán (7).
Los “nazarenos” de la final fueron: Miguel Palacios (central), Raymundo Báez (cuarto árbitro), Oscar Mejía y Edwin Jiménez (abanderados).
“Esto es histórico, fue la primera de –ojalá- muchas finales en este bello estadio. La gente de Las Vegas Lights nos prestarán el estadio para nuestras finales de aquí en adelante, estamos muy contentos y agradecidos con la gente que nos apoyó”, comentó con su parte Juan Villaseñor, tesorero de la Liga Mayor, destacando que “los jugadores que militan en la liga merecen tener espacios como este; cancha profesional, estadio con todas las amenidades necesarias para mantener el ánimo muy alto. El nivel competitivo de la liga quedó de manifiesto en el empate, los dos equipos son merecedores de la corona, pero la gente, creo, fue la ganadora”.
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