La UNLV reveló su nuevo calendario de fútbol americano el jueves. Los Rebels abren contra San Diego State el 24 de octubre en Carson, California, y luego jugarán contra la UNR la semana siguiente en el Estadio Allegiant por la batalla anual del Fremont Cannon.
El juego de rivalidad contra el Wolfpack está programado normalmente al final de la temporada, pero tendrá lugar el 31 de octubre como parte del “Nevada Day Weekend”. La UNLV ha ganado los dos últimos encuentros, incluyendo una victoria por 33 a 30 la temporada pasada.
La UNLV no respondió a las solicitudes de comentarios sobre los detalles del programa.
Los Rebels jugarán todos sus partidos en casa en el Estadio Allegiant, incluyendo los partidos contra Fresno State, Wyoming y Boise State. La UNLV también jugará partidos fuera contra San Jose State, Colorado State y Hawaii, concluyendo la temporada regular el 12 de diciembre.
El partido del campeonato de Mountain West está programado para el 19 de diciembre en el estadio de la escuela. La conferencia está abandonando su formato divisional esta temporada para “permitir la máxima flexibilidad dadas las diversas limitaciones que se tuvieron que considerar”, señaló el comisionado de Mountain West, Craig Thompson, en un comunicado.
“La temporada comienza con un número desigual de partidos de la conferencia, y existe la posibilidad de que se pierdan partidos adicionales por los desafíos de COVID-19”, añadió Thompson. “Los procedimientos para determinar los participantes y la ubicación del MW Football Championship Game se adaptaron para acomodar una gama de resultados de la manera más equitativa posible”.
Los Rebels solicitaron jugar sus partidos en casa frente a un número limitado de espectadores después de que el gobernador Steve Sisolak suavizara las restricciones para los eventos a gran escala a principios de esta semana. Las grandes reuniones pueden realizarse en lugares a no más del 10 por ciento de su capacidad, lo que significa que un máximo de seis mil 500 podrían asistir a los partidos en el Estadio Allegiant, que tiene una capacidad de 65 mil para el fútbol.
La propuesta de la UNLV está pendiente de aprobación.
Si se aprueba, los titulares de entradas de la temporada tendrán acceso prioritario a las entradas para los partidos en casa esta temporada. Habrá asientos extra disponibles para el público en general.
“Nuestros estudiantes-atletas han estado trabajando muy duro en la preparación para la oportunidad de competir, y están emocionados de representar a nuestra gran ciudad”, mencionó la directora atlética de los Rebels, Desiree Reed-Francois, a principios de esta semana en un comunicado. “Estamos entusiasmados de que puedan tener la oportunidad de jugar frente a los fans en nuestro increíble nuevo estadio”.
Los Rebels están entrando en su primer año bajo el entrenador Marcus Arroyo. Comenzaron a practicar el viernes pasado, un día después de que la liga finalizara su regreso al juego.