El próximo entrenador principal de los Raiders, quien reemplazará al entrenador interino Rich Bisaccia, se hará cargo de la franquicia en un momento crucial de su historia.
Hay mucho en juego con la agitación creada por la renuncia de Jon Gruden, lo que hace que la contratación del entrenador principal adecuado sea más importante que nunca.
Los Raiders representan un empleo atractivo, con un flamante estadio, unas instalaciones de prácticas de última generación, un equipo joven y un nuevo mercado emergente en Las Vegas. Así que no hay razón para que el propietario de los Raiders, Mark Davis, no pueda dar un golpe de efecto con su próxima contratación.
Estos son algunos de los primeros nombres a considerar:
Gus Bradley
Discípulo de Gruden y ex entrenador en jefe de los Jacksonville Jaguars, Bradley, coordinador defensivo del equipo por primera vez, aporta experiencia y una personalidad contagiosa que serviría a los Raiders para navegar por las agitadas aguas creadas por la controversia de los correos electrónicos de Gruden.
Bradley pasó cuatro temporadas como entrenador en jefe de los Jaguars, entre 2013 y 2016. Si bien su registro de 14-48 es sombrío en el mejor de los casos, ayudó a construir un roster en Jacksonville que eventualmente llegaría al juego de campeonato de la AFC en 2017.
Como asistente, Bradley fue el coordinador defensivo de los Seattle Seahawks y los Los Angeles Chargers y obtuvo altas calificaciones en ambos puestos.
David Shaw
El entrenador de Stanford se ha resistido a las propuestas de la NFL a lo largo de los años, pero, a sus 49 años, pudiera estar buscando su próximo gran desafío y entrenar a los Raiders ciertamente rascaría esa comezón.
Shaw aporta liderazgo, integridad, respeto y éxito. Y como los Raiders tratan de asegurarse el líder para su futuro, él cumple con todo tipo de requisitos atractivos.
Joe Brady
La reciente tendencia de los equipos de la NFL a contratar coordinadores ofensivos de alto nivel probablemente significará que los Raiders echen un vistazo a Brady, que está en ese papel con los Carolina Panthers. Su respetado trabajo con los New Orleans Saints, Louisiana State y ahora los Panthers lo convierten en un candidato ideal.
Brady fue asistente ofensivo con los Saints bajo el mando de Sean Payton en 2017 y 2018 antes de asumir como coordinador de juego de pase en LSU. Con los Tigers, ayudó a preparar a Joe Burrow para convertirlo en ganador del Trofeo Heisman y a LSU en campeón nacional.
Los Panthers lo contrataron como coordinador ofensivo en 2020.
Brady se graduó en 2013 en William & Mary con una doble especialización en gestión de procesos y consultoría y kinesiología y ciencias de la salud. Posteriormente obtuvo una maestría en liderazgo educativo en Penn State. El fuerte énfasis en la enseñanza pudiera ser una gran ventaja para un equipo joven.
Eric Bieniemy
A pesar de su impresionante currículum y de las numerosas entrevistas para puestos de entrenador jefe, Bieniemy, el coordinador ofensivo de los Chiefs, aún no ha tenido la oportunidad de dirigir su propio equipo.
Sin embargo, su trabajo bajo el mando de Andy Reid en Kansas City es indiscutible y es evidente que su momento está por llegar.
Brian Daboll
El trabajo que ha hecho Daboll como coordinador ofensivo de Buffalo, específicamente con Josh Allen, lo ha puesto en los radares de la NFL como candidato a entrenador en jefe. Es solo cuestión de tiempo que suceda. Su largo e impresionante currículum, y una amplia variedad de escalas como entrenador, lo dejan bien preparado para hacerse cargo de su propio equipo.
Darrell Bevell
Al igual que Bieniemy, Bevell debería haber tenido una oportunidad. Su trabajo como coordinador ofensivo en Minnesota, Detroit, Seattle y ahora Jacksonville lo hacen más que calificado.