El defensa de Pumas de la UNAM, Marco Antonio Palacios, justificó de alguna manera sus amonestaciones, y en otros casos sus expulsiones, porque se entrega al máximo en los partidos al resaltar que ese es el sello que distingue al equipo.
“Es lo que siempre trato de hacer, brindarme en cada partido al máximo; ese es el sello que tiene Pumas y el jugador que no juegue con garra en Pumas no sirve, se tiene que ir” , advirtió el zaguero en entrevista.
El temperamento que ha mostrado el “3” del conjunto auriazul en algunos partidos le ha costado ganarse algunas tarjetas amarillas que a veces suelen terminan en expulsión, aun así, aseguró que seguirá igual de entregado al equipo.
“Sí, entregado sí, siempre, y con mucha disposición al trabajo y al sacrificio; 100 por ciento” , aseveró Palacios, quien hace una semana recibió el apoyo del técnico José Luis Trejo, quien dijo que le gusta contar con ese tipo de hombres que luchan por la camiseta.
Al respecto, el jugador señaló que a pesar de su desempeño en los partidos del torneo regular, en liguilla ha logrado controlar el temperamento con el que entra a la disputa por el balón y que a veces lo comprometen mucho, algo de lo que ha platicado con algunos técnicos.
“Creo que he demostrado durante mi carrera que en momentos importantes, en semifinales, en liguillas, siempre he mantenido bien mi temperamento, me sé controlar, pero a veces se genera mucha pasión en el terreno de juego, pero siempre estoy en constante plática con mis entrenadores” .