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La primera derrota de los Raiders

FOXBOROUGH, Mass. — Los Raiders volvieron a caer en algunos malos hábitos el domingo contra los Patriots de Nueva Inglaterra, con penaltis, pérdidas de balón y un juego descuidado que les costó una derrota de 36 a 20 que expuso algunas importantes preocupaciones.

El juego inteligente y eficiente que marcó sus dos primeras victorias no se encontró en ninguna parte. En su lugar, desperdiciaron varias oportunidades de anotar, cedieron el balón repetidamente, batallaron por convertir el tercer down y se vieron abrumados por el apresurado ataque de los Patriots.

Los Raiders estaban entre los equipos más eficientes de la NFL después de las dos primeras semanas, pero eso se detuvo bruscamente en medio de tres turnos, seis penalizaciones y cinco viajes a la zona roja que produjeron sólo 13 puntos.

Una serie de errores no forzados con el juego en la línea sabotearon a los Raiders.

Entre ellos:

■ Una pérdida de balón en el primer trimestre por Josh Jacobs en la línea de 12 yardas de los Patriots que negó los puntos clave de los Raiders.

■ Un penal por el tackle Denzelle Good para eliminar un primer down clave que habría establecido los Raiders con un primer y un gol en la línea de 3 yardas de los Patriots. En cambio, los Raiders no pudieron convertir en la tercera y octava y tuvieron que conformarse con un gol de campo en lugar de un touchdown.

■ Un balón perdido de Derek Carr en el segundo cuarto que puso a los Patriots en la línea de 42 yardas de los Raiders, lo que llevó a un gol de campo de Nueva Inglaterra para avanzar 6 a 3.

■ Y finalmente, Daniel Carlson perdió una carrera de campo de 41 yardas en el primer intento del tercer cuarto. Los Patriots anotaron un touchdown en su siguiente impulso para subir 20 a 10.

Eso es además de que los Raiders convirtieron sólo tres de los nueve terceros downs y rindieron 250 yardas de carrera.

Eso simplemente no puede suceder contra un oponente de calidad.

“No contra los Patriots de Nueva Inglaterra”, subrayó el entrenador de los Raiders, Jon Gruden. “No contra nadie”.

El tight end, Foster Moreau añadió: “No vas a ganar muchos partidos perdiendo el balón tantas veces como lo hicimos hoy. Hay que entrar en la zona roja, debes anotar puntos”.

Fue aún más decepcionante dado que los Raiders promediaron 6.9 yardas por jugada, estuvieron esencialmente parejos en la ofensiva total y permanecieron en la distancia de ataque en la segunda mitad. A veces no podían salir de su propio camino.

“Sentimos que fue un partido realmente ganable”, mencionó el defensa, Maxx Crosby. “Estábamos en una buena situación y no logramos avanzar, sólo debemos mejorar. No hay excusas”.

Y aún así, mientras los Raiders se preparaban para abordar su vuelo de regreso a Las Vegas, había una sensación de esperanza.

“Si salimos y no somos capaces de hacer una sola cosa bien, entonces hay un problema. Entonces debemos ver las repeticiones”, dijo el mariscal de campo de los Raiders, Derek Carr.

El wide receiver Hunter Renfrow comentó: “Es frustrante, pero también alentador porque sabemos que si no cometemos esos errores nos damos una buena oportunidad de ser competitivos”.

No fue solo que los Raiders fallaran en detener la carrera y entregaran dos touchdowns en el suelo. Fue el puñado de veces que dejaron huecos descubiertos con las asignaciones, las numerosas entradas que fallaron y los pobres ángulos que tomaron persiguiendo a quienes cargaban el balón.

“Obviamente fallamos algunos tacleos y tuvimos un par de jugadores fuera de su posición”, señaló Gruden.

Todo esto dejó a los frustrados Raiders preguntándose qué fue exactamente lo que falló.

“Creo que es sólo disciplina”, agregó Crosby. “Va para toda la defensa. Debemos estar en nuestras posiciones y hacer nuestro trabajo, taclear. Y no estamos haciendo un buen trabajo de eso ahora mismo”.

Los Raiders perdieron tres titulares contra los Patriots: el tackle derecho Trent Brown, el guardia izquierdo Richie Incognito y el linebacker medio Nick Kwiatkoski.

Al final del partido del domingo, el wide receiver novato, Bryan Edwards, se vio afectado por una lesión en la pierna que en un momento dado le obligó a ir a los vestidores, y el cornerback novato, Damon Arnette, tuvo que abandonar brevemente el partido para recibir tratamiento por la fractura de su pulgar derecho.

“Empiezas a preguntarte qué demonios está pasando”, señaló Gruden. “Pero esto es la Liga Nacional de Fútbol. Es para hombres mentalmente duros”.

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