La improductividad con el bate no es lo único contagioso en la alineación de los Rockies de Colorado últimamente.
Una infección viral se ha propagado por el vestuario, enviando al receptor dominicano Wilín Rosario y al jugador de cuadro Josh Rutledge a la lista de peloteros inhabilitados por 15 días con fiebre alta y dolores de cabeza.
Para evitar que el virus se propague aún más, el manager Walt Weiss he pedido a sus jugadores lavarse las manos constantemente. Debido a las felicitaciones que suelen brindarse los peloteros, dándose numerosas palmadas después de pegar imparables importantes —como el cuadrangular de Charlie Culberson que dejó en el terreno a los Mets de Nueva York el sábado— podría crecer el riesgo de propagar la infección.
“Cuando uno tiene un virus tan agresivo como este, se tiende a pasar por todo el vestuario”, dijo Weiss el domingo antes de que su equipo terminara con una derrota una serie de cuatro juegos con los Mets.
Respecto a los padecimientos de bateo, los Rockies tampoco desean que sigan propagándose. Colorado lidera la liga en cuadrangulares (43), carreras impulsadas (178) y promedio al bate (.300).
En lo que va de la presente campaña, Rosario batea para .239 con tres jonrones y 15 carreras remolcadas en 24 partidos. También sufrió recientemente una lesión en una mano, pero Weiss dijo que eso no fue un factor para colocarlo en lista de inhabilitados.
“Fue estrictamente por el virus”, aseguró Weiss.
Rutledge se sumó a la lista el viernes con el mismo tipo de síntomas de Rosario.
“Tienen fiebres muy elevadas con (el virus)”, informó el piloto.
“Ustedes saben, muchas de las cosas que uno aprende en primaria”, dijo Pacheco. “Tuvimos una sesión al respecto el otro día, a fin de asegurarnos que uno se lave las manos porque nos felicitamos mutuamente. Ojalá lo hagamos muy seguido”.