Se están haciendo preparativos entre bastidores y a la vista del público por si un equipo de la NHL llega a Salt Lake City lo antes posible, quizá ya este otoño.
Después de que el posible dueño, Ryan Smith, solicitara a principios de esta semana sugerencias para el nombre del equipo, el miércoles se supo que la liga ha estado trabajando en planes de contingencia en caso de que los Arizona Coyotes se trasladen este verano.
La NHL ha estado trabajando en dos borradores de calendario para la próxima temporada en caso de que el equipo esté en Arizona o jugando bajo un nombre diferente en Utah, según una persona familiarizada con la planificación. La persona habló con The Associated Press bajo condición de anonimato porque no se ha tomado ninguna decisión.
El calendario de la próxima temporada suele darse a conocer a finales de junio, después de que se entregue la Copa Stanley, en torno al draft y antes de que se abra la agencia libre el 1° de julio. El comisionado Gary Bettman, cuando se le preguntó el mes pasado sobre el calendario y los posibles planes de contingencia, solo dijo: “Todavía tenemos algo de tiempo”.
Mientras que la NHL, los Coyotes y Smith Entertainment Group declinaron hacer comentarios sobre el reporte del doble calendario, otras maquinaciones están en marcha para preparar una posible reubicación. Según varios reportes publicados, la liga envió un memo a los dueños poniéndolos al tanto de la situación y advirtiéndoles que hay partes móviles y que nada está hecho.
Si la venta a Smith se produce pronto, llegaría tras meses de especulaciones después de que el dueño de los Utah Jazz de la NBA anunciara en enero no solo su interés en tener un club de la NHL en Salt Lake City, sino la capacidad de hacerlo realidad de inmediato. El grupo de Smith pidió entonces que se iniciara un proceso de expansión, algo que también ansían varios grupos de Atlanta.
El momento, mientras se realizan los preparativos para que Salt Lake City acoja los Juegos Olímpicos de Invierno de 2034, coincidió con la continua incertidumbre que rodea a los Coyotes, que están jugando una segunda temporada en un estadio de 5 mil asientos y siguen buscando un hogar a largo plazo.
El director ejecutivo de la Asociación de Jugadores de la NHL, Marty Walsh, ha expresado en repetidas ocasiones su frustración por la situación actual de los Coyotes como segundo inquilino en un edificio del campus de Arizona State en Tempe. Bettman ha dicho que el dueño Alex Meruelo está trabajando en ello.
“Es un trabajo duro, y él se ha comprometido a ello”, dijo Bettman a The Associated Press el mes pasado. “Creo que la gente ansía certidumbre. Y nosotros también, pero esto no es un partido de 60 minutos en el que se enciende la luz y se acaba el partido”.
Los Coyotes afirmaron la semana pasada que están decididos a ganar la subasta de un terreno en Phoenix que albergaría un estadio con 17 mil asientos y un distrito de entretenimiento. El Departamento de Terrenos del Estado de Arizona fijó la subasta para el 27 de junio con una puja inicial de 68.5 millones de dólares.
Ya existe un estadio en el centro de Salt Lake City, y el plan de los propietarios de los Jazz prevé usar el Delta Center como sede temporal de un equipo de hockey hasta que se construya un nuevo edificio. Ese grupo ha estado hablando con la liga desde 2022.
“Durante las conversaciones en el transcurso de los últimos dos años, nos ha impresionado el compromiso de Ryan y Ashley Smith con su comunidad y su pasión y visión de Utah, no solo como un mercado de hockey, sino como un destino deportivo y de entretenimiento preeminente”, dijo la NHL en un comunicado en enero. “Utah es un mercado prometedor y esperamos continuar nuestras conversaciones”.
Uno de los planes, según Daily Faceoff, que reportó por primera vez la contingencia del calendario, implica que Meruelo venda a Smith por mil millones de dólares o más con la capacidad de traer de vuelta a los Coyotes como un equipo de expansión una vez que se construya un estadio.
La NHL ha dicho que no tiene planes de expansión más allá de 32 equipos, a pesar de la especulación sobre posibles adiciones en Salt Lake City, Atlanta y Houston.