El nigeriano Israel Adesanya (22-1) y el estadounidense Jared Cannonier (15-5) se llevaron unos pocos abucheos del público, pero ofrecieron un estratégico combate por el título de peso mediano en UFC 276, evento realizado el sábado 2 de julio en T-Mobile Arena, donde Adesanya se quedó con el cinturón por decisión unánime.
“Fue realmente difícil ponerse en marcha, porque él tenía un excelente plan para la pelea”, expresó Adesanya al concluir las acciones.
La batalla comenzó lenta en el primer asalto, el cual solamente ofreció algunos intentos mutuos de golpes y patadas que en su mayoría fueron bien esquivados. Adesanya conectó un par de patadas sobre la pantorrilla de su oponente en el segundo episodio, con lo cual se desató la vocación ofensiva de ambos, pero con el nigeriano siendo ligeramente superior desde ese momento.
Con forcejeo, Cannonier intentó derribar a su rival en el tercer asalto, pero se quedó muy lejos de conseguirlo y Adesanya parecía seguir manejando el trámite del combate. Como era de esperarse, ambos peleadores aumentaron su intensidad en algunos momentos del cuarto episodio, aunque el nigeriano continuaba siendo el más efectivo en sus ataques y distancia.
Las emociones no llegaron para el quinto episodio y los abucheos por parte del público aumentaron, en parte porque el estadounidense llevó nuevamente la pelea a un forcejeo para intentar someter a un Adesanya que supo contrarrestar esos embates. La campana final sonó y el triunfo, por decisión unánime (49-46, 49-46, 50-45), fue para el nigeriano.
Y parece que Adesanya rápidamente cambió el “chip” para, aún sobre el octágono, lanzarle un reto a Alexandro “Poatan” Pereira.
“El próximo es ‘Poatan’. Esto no es kickboxing y lo voy a dejar ‘congelado’”, aseveró el nigeriano.
– Volkanovski se mantiene como campeón de peso pluma
El combate coestelar de la noche también presentó la disputa de un campeonato, el de peso pluma, donde el australiano Alexander Volkanovski (24-1) terminó imponiéndose ante el estadounidense Max Holloway (23-6) en cinco asaltos que generaron emoción en los miles de aficionados reunidos en la arena.
“Quiero pelear en este octágono todo lo posible. Me gustaría ser campeón también en las 155 libras”, dijo Volkanovski al término de esta pelea que completó la trilogía.
Los primeros instantes de la batalla fueron de estudio mutuo, pero bastó con que el australiano conectara el primer golpe para que ambos peleadores mostraran su agresividad. Volkanovski intentó someter a Holloway en el segundo asalto, pero este pudo salir del forcejeo, aunque ya presentaba una herida sangrante en la ceja izquierda.
Los cánticos de aliento para el estadounidense se escucharon en el tercer episodio, sin embargo, no fueron suficientes para tomar ventaja y la pelea por momentos se convirtió en un duro forcejeo. Los certeros ataques de Volkanovski ocasionaron que la herida de Holloway se hiciera más grande y aparatosa en el cuarto asalto.
Esta reñida y atractiva pelea aumentó de intensidad en el quinto y último episodio, donde el constante sangrado en el rostro de Holloway pareció ser un factor en su contra; por otro lado, Volkanovski manejó las acciones finales a su favor para obtener la victoria por decisión unánime (50-45, 50-45, 50-45).
“Max Holloway es una ‘bestia’ totalmente. La intensidad que trajo los últimos días, era necesaria. Sabía que era el mejor, solo necesitaba recordármelo a mí mismo”, acotó el australiano como una forma de reconocimiento a su adversario.
En otros resultados de la cartelera principal: Bryan Barberena consiguió un nocaut técnico sobre Robbie Lawler en el segundo asalto (peso wélter), Alex Pereira noqueó a Sean Strickland en el primer episodio (peso mediano), y Pedro Munhoz se impuso ante Sean O’Malley (peso gallo).
El evento contó con la asistencia de destacadas personalidades como Mel Gibson, Chris Pratt, Valentina Shevchenko, Kamaru Usman, Miles Teller, Shaun White, Criss Ángel, Charles Oliveira, Anuel AA, entre otros.
De acuerdo con Ultimate Fighting Championship (UFC), la cifra total de asistentes a este evento fue de 19,649, lo que generó un ingreso en taquilla de $10,409,553.70.