Steven Brooks, el exasambleísta de Nevada que fue arrestado la semana pasada y se enfrenta a cargos por conducir bajo la influencia de sustancias y por un delito grave de agresión, no cooperó con los agentes, que usaron un perro policía para detenerlo y acabaron sedándolo, según un reporte publicado el lunes.
Brooks fue arrestado el jueves después de una persecución en la que estrelló su auto, según la policía y los registros del Centro de Detención del Condado Clark. El viernes compareció ante el Tribunal de Justicia y su abogado solicitó que se evaluara su capacidad.
La policía comenzó a perseguir Brooks, que conducía un 2001 GMC Yukon, después de que amenazó a un agente y le pidió a la policía “disparar”, según el reporte.
La policía dijo que Brooks tenía un objeto plateado en la mano y los agentes pensaron que estaba armado.
En el reporte no queda claro cómo terminó la persecución, pero la policía dijo que Brooks conducía a 70 mph en una zona de 25 mph y se saltaba semáforos en rojo y señales de alto. En un momento dado chocó y siguió conduciendo, según el reporte.
Los agentes no pudieron realizar las pruebas de alcoholemia y fue difícil arrestarlo, según la policía. Cuando salió del auto, estaba maldiciendo, “gritando incoherentemente” y tropezando, dijo la policía. “Brooks no cooperó y fue necesario utilizar un K9 para detenerlo”, según el reporte.
Brooks fue sedado y se le extrajo sangre para un análisis de sangre. Un juez tuvo que autorizar el análisis de sangre porque estaba sedado. El reporte dice que se solicitó una prueba de marihuana.
El lunes por la mañana, Brooks seguía en la cárcel. Su próxima audiencia está prevista para el martes.
Brooks fue expulsado de la Legislatura de Nevada en 2013 después de que amenazara de muerte a la asambleísta Marilyn Kirkpatrick, demócrata por North Las Vegas, porque al parecer estaba molesto por no haber sido nombrado presidente del Comité de Medios y Arbitrios. Fue el primer legislador expulsado. Brooks representaba a North Las Vegas como demócrata.