Un hombre de 37 años se declaró culpable de una serie de tiroteos mortales en 2021 que causaron la muerte de tres personas el Día del Trabajo.
Tristan Tidwell fue acusado de disparar mortalmente a tres hombres en un lapso de dos horas el 6 de septiembre de 2021, cerca de Cheyenne Avenue y Civic Center Drive, en North Las Vegas. El jueves, Tidwell se declaró culpable, pero mentalmente enfermo, de tres cargos de asesinato con arma mortal, según consta en los registros judiciales.
Como parte de la declaración de culpabilidad, los fiscales no solicitarán pena de muerte, según la presentación judicial. Tidwell también aceptó tres cadenas perpetuas sin posibilidad de libertad condicional, aunque el juez tendrá la última palabra sobre la sentencia.
Tidwell se consideró competente para hacer frente a los cargos tras las evaluaciones de salud mental realizadas por psiquiatras del estado y por un evaluador independiente, según consta en los registros del tribunal.
Sus abogados de oficio no respondieron inmediatamente el martes a la petición de comentarios.
Cuando la policía detuvo a Tidwell la noche de los asesinatos, le dijo a los agentes que era un desamparado y que creía que los hombres a los que disparó también eran desamparados, según un reporte de arresto. También se le acusó de disparar a un perro de la zona.
Cuando la policía le preguntó si creía que los disparos estaban justificados, Tidwell dijo a la policía: “Oh, no. Está mal. Va contra la ley. Pero había que hacerlo”.
Dijo a la policía que tenía que “acabar” con los hombres, y afirmó que “todo lo que no tiene casa se acaba”, según su reporte de arresto.
Quienes conocían a los hombres dijeron que al menos dos de las víctimas no eran desamparados, sino que simplemente estaban dando un paseo.
Jorge Godoy-Lua, de 43 años, murió de heridas de bala en la espalda, Oliver Hillman, de 53 años, murió de una herida de bala en el cuello, y Michael Myers, de 27 años, murió de una herida de bala en la zona posterior del hombro, según la oficina forense del Condado Clark.
Myers fue asesinado a pocos minutos de su casa, poco después de salir a comprar comida para sus cuatro hijos, según declaró anteriormente su esposa, Desiree Robinson, al Las Vegas Review-Journal. Myers, al que sus seres queridos llamaban “Mike Mike”, era un hombre trabajador al que le gustaban los gatos y la música.
Godoy-Lua tenía dos hijos adolescentes y emigró de México para trabajar por una vida mejor para su familia, según ha declarado su sobrina. Su vecino había declarado anteriormente al Review-Journal que a Godoy-Lua le encantaba salir a pasear y se enorgullecía de su trabajo como techador.
La audiencia para dictar sentencia contra Tidwell está prevista para el 10 de marzo, según consta en los registros del tribunal. El martes permaneció en el Centro de Detención del Condado Clark sin fianza.