Una jueza de Las Vegas fijó la fecha del juicio para cuatro adolescentes que enfrentan cargos como adultos por la golpiza mortal de un estudiante de Rancho High School.
Damien Hernández, de 18 años; Dontral Beaver, de 16; Gianni Robinson, de 17; y Treavion Randolph, de 16, comparecieron ante el tribunal el jueves, más de un mes después de que fueran acusados de homicidio en segundo grado y conspiración para cometer agresiones.
Son cuatro de los nueve adolescentes que han sido arrestados en relación con el asesinato de Jonathan Lewis, de 17 años, que según la policía fue atacado cerca de Rancho High School en noviembre.
La jueza de distrito Tierra Jones programó un juicio para los cuatro adolescentes que comenzará el 1° de abril.
Los coacusados deben volver al tribunal el 7 de marzo para que sus abogados presenten peticiones de impugnación de los cargos de homicidio y conspiración. Los abogados defensores de los cuatro adolescentes presentaron documentos judiciales la semana pasada pidiendo a la jueza que desestimara el caso.
Los investigadores han dicho que Lewis fue atacado por un grupo de hasta 10 adolescentes en un callejón cercano a la preparatoria. La golpiza mortal fue grabada en video, en el que se ve a los adolescentes pisoteando, pateando y golpeando a Lewis hasta que cae inconsciente. Murió a consecuencia de las heridas seis días después.
Las imágenes de vigilancia y el video del teléfono celular mostraron que Lewis empujó a un estudiante, más tarde identificado como Robinson por su abogado defensor, antes de que comenzara la confrontación. El video mostró entonces que Lewis se quitó la sudadera y golpeó a otro estudiante antes de ser rodeado por el grupo de adolescentes.
En una entrevista con la policía, Robinson dijo que se había enfrentado anteriormente a Lewis por robar un “wax pen o un vaporizador de marihuana”, aunque negó haber tomado los artículos, según el testimonio de una audiencia del gran jurado.
Los abogados defensores han argumentado que no todos los estudiantes tenían la misma culpabilidad en la muerte de Lewis, y que los fiscales no aportaron pruebas suficientes para demostrar los cargos de asesinato o conspiración.
Otros cuatro menores arrestados han admitido ante un tribunal de menores haber cometido homicidio voluntario y han aceptado una pena de internamiento en un correccional de menores. El caso de un quinto adolescente sigue en el tribunal de menores, pendiente de una evaluación de salud mental.