El albacea de O.J. Simpson pide autorización para subastar objetos de la herencia
El albacea de la herencia de O.J. Simpson pidió permiso a un juez para subastar propiedades pertenecientes al sospechoso de asesinato absuelto y exjugador de fútbol americano.
Malcolm LaVergne, abogado de Simpson en Las Vegas desde hace muchos años y a quien Simpson nombró albacea testamentario, inició los procedimientos de sucesión en mayo, un mes después de que Simpson muriera en su casa de Las Vegas. LaVergne pide ahora autorización judicial para vender varios objetos de Simpson, entre ellos su vehículo, palos de golf y un trofeo Heisman que Simpson poseía, aunque en una petición presentada el martes se señalaba que no estaba claro si el trofeo era auténtico o una réplica.
La petición señaló que los artículos de Simpson pueden ser más valiosos que los de los casos típicos de sucesión testamentaria, y podrían atraer “un interés significativo del público para su compra”.
“Dada la naturaleza de alto perfil del difunto, así como la naturaleza única de los bienes personales, el señor LaVergne busca una orden de este Tribunal que le dé autoridad para celebrar contratos con casas de subastas para vender los bienes personales del difunto con el fin de maximizar el valor del patrimonio en beneficio de los acreedores y otras personas interesadas”, escribieron los abogados de LaVergne en la petición.
Simpson murió a los 76 años de cáncer de próstata. Alcanzó la fama como estrella del fútbol americano y se dio a conocer como el hombre acusado de ser absuelto por el asesinato de su exesposa, Nicole Brown Simpson, y del amigo de ésta, Ron Goldman, en 1994.
También se enfrentó a problemas legales en Las Vegas y fue declarado culpable en 2007 de un robo de recuerdos deportivos en una habitación de hotel del Palace Station, por el que fue condenado a entre nueve y 33 años de prisión. Simpson salió de la prisión de Nevada en 2017.
La totalidad del patrimonio de Simpson sigue siendo desconocida.
LaVergne había declarado al Las Vegas Review-Journal que lucharía para impedir el pago de una sentencia de 33.5 millones de dólares concedida por un jurado en 1997 a las familias de Goldman y Nicole Brown Simpson. Más tarde se retractó de esas declaraciones y dijo que tiene la intención de resolver todas las posibles reclamaciones de los acreedores contra la herencia.
La audiencia sobre la petición del martes está prevista para el 26 de julio, según consta en los registros judiciales.